Las autoridades penitenciarias de Uruguayana, Brasil, confirmaron el hallazgo sin vida de Rogerio Ferreira Franco en una prisión local. Ferreira Franco había sido entregado a las autoridades brasileñas el pasado miércoles, luego de ser condenado en Paso de los Libres, Corrientes, por tráfico de armas y posteriormente deportado de Argentina con prohibición de reingreso.
El domingo por la mañana, internos del Servicio Penitenciario de Uruguayana informaron a un guardia sobre el deceso de Ferreira Franco en su celda. Al momento de esta publicación, las causas de la muerte no han sido establecidas de manera fehaciente. La policía brasileña se encuentra investigando el caso y no descarta ninguna hipótesis, incluyendo suicidio u homicidio.
Rogerio Ferreira Franco, de 50 años y oriundo del estado de Paraná, era un expolicía civil que había sido exonerado. Tenía pendientes con la justicia brasileña al menos diez causas judiciales, las cuales abarcaban desde episodios violentos hasta crímenes impunes, y sobre él pesaba una orden de detención.
La reciente condena en Argentina tuvo lugar en un juicio abreviado llevado a cabo en Paso de los Libres. El Juez de Garantías Gabriel Aldaz homologó un acuerdo de partes. En este, Ferreira Franco fue condenado a la pena de tres años de prisión en suspenso, tras ser hallado penalmente responsable del delito de Tenencia ilegítima de arma de fuego de guerra de uso civil condicional (un revólver calibre 38 SPL, marca Pucara).
Ferreira Franco había sido interceptado el 5 de abril a las 23:40 horas en un control de Gendarmería Nacional en la localidad de Tapebicuá. En ese momento, viajaba en una empresa de transporte desde Posadas, Misiones, hacia San Francisco Solano, provincia de Buenos Aires. La revisión de su bolso por parte de los uniformados reveló el arma de fuego y cuatro municiones, cuya procedencia no pudo ser justificada.
En la audiencia judicial, la Fiscal de Investigaciones concretas, Dra. Daniela Di Tomaso, solicitó la condena y, adicionalmente, la inmediata exclusión del país y la prohibición de reingreso del condenado. Esta medida fue ejecutada el mismo día. Para concretar la disposición, el Ministerio Público Fiscal coordinó con Gendarmería Nacional para llevar a cabo los trámites migratorios hasta que el condenado saliera del país.
Tras la finalización de la audiencia, personal de la Unidad Penal Nº 11, donde Ferreira Franco se encontraba alojado, lo trasladó en compañía de la Fiscal hasta el puente internacional que conecta Paso de los Libres con Uruguayana. Allí, fue recibido por la policía de Brasil, quedando bajo su custodia y a disposición de la justicia brasileña.