Vicente Farías, titular de la Asociación de Gimnasios y Fabricio Gómez Cabral, referente de la Asociación de Canchas de Fútbol 5, coincidieron en el difícil momento que atraviesa el sector en esta etapa de la pandemia con la prórroga de prohibiciones. Ambos reflajaron las dificultades que viven en toda la provincia.
En estos días de fase 3 y fase 2 en numerosas ciudades de la provincia, las actividades deportivas se vieron afectadas y los empresarios de dos sectores severamente golpeados por esta situación en plena pandemia, dialogaron con EL LIBERTADOR.
En primer caso, el presidente de la Asociación de Gimnasios de Corrientes, en estos días de cierre nuevamente de sus lugares de trabajo se refirió a la dificilísima situación que atraviesan si deben seguir cerrados. Hubo movilización en diferentes ciudades.
«Esta situación es insostenible, la mayoría de los gimnasios está a punto de quiebre, económicamente muy agobiados, no hay situación más agobiante que la de no poder trabajar, tener todo ordenado, los ambientes controlados y seguros y no poder trabajar», esgrimió Vicente Farías, titular de la Asociación que nuclea a los propietarios de gimnasios de la provincia de Corrientes.
Ante las medidas de seguir una semana más en fase 3, y pese a la habilitación en la ciudad de Corrientes de trabajar en grupos al aire libre, el profesor Farías se refirió a la situación general que atraviesa el sector que representa.
«Esta medida la tomamos muy mal. Acatamos los ordenamientos por esta situación crítica sanitaria. Pero somos conscientes de que los gimnasios no son foco de contagios, no hay estadísticas que afirmen que hay contagios en los gimnasios, hoy nos cierran porque somos ambientes cerrados».
«El Gobierno te obliga a trabajar en la clandestinidad, los profes que no pueden ser pagados en los gimnasios, salen a los parques, porque no son los gimnasios los que salen, nosotros no podemos decirles a nuestros empleados vamos a trabajar en el parque. Porque no les podemos pagar, hoy nos cerraron el día 20, y el 30 vamos a ver si juntamos algo para pagar impuestos y obligaciones, pero no alcanza, imagínate si esto se puede extender 10 días más. Para nosotros son 14 días, entonces no podemos aguantar semejante situación económica, no podemos aguantar el colapso financiero. Nosotros vivimos el día a día».
Y agregó: «Si no trabajamos, no comemos, no pagamos, es así de simple, los alquileres suben y no los vamos a poder pagar».
En tanto que sobre la situación económica, Farías agregó: «Los salarios no se van a poder cumplir, tendremos que hablar con los empleados, decirles «no les podemos pagar». No podemos decirles a los profes, no salgan a trabajar a la calle, son los mismos alumnos los que los llaman, no son los profes ni los gimnasios que los obligan a entrar o ir a algún lado. Nosotros cuidamos a las gallinas de los huevos de oro. Que son los alumnos, que esto quede claro».
PROTOCOLOS
MEDIANTE
«Tenemos un protocolo, se cumple y sirve, tenemos un nivel de contagio cero en los gimnasios, hemos trabajado en fase 3 en otra época y no tuvimos problemas, y el Gobierno lo sabe. Entonces cómo vamos a negar el espacio seguro que brindamos a las personas para que combatan el aburrimiento, la depresión, patologías, enfermedades cardiológicas, obesidad, triglicéridos, necesitamos trabajar, y la gente necesita hacer actividades físicas. Y qué mejor que hacerlo en un espacio físico seguro, protegido y controlado, donde lo hacemos de una manera eficiente y con un protocolo riguroso, que sirve para esta situación. Los mismos alumnos limpian sus lugares, asisten a los gimnasios con sus toallas, agua, alcohol en gel, terminamos de trabajar y ellos mismos limpian».
«Nos conocemos entre todos, tenemos cupo, no trabajan más allá del horario y cupo que se tiene» enfatizó. El protocolo que se da, sirve y es seguro, son ambientes seguros los gimnasios, no son la plaza o los paseos».
«Por eso nos sentimos muy mal y a punto de quiebre, y esto te lo digo en primera persona, ya va a ser un año de la primera apertura, abrimos el 4 de Junio y la gente se volcó al gimnasio, con muchas ganas, con garantías y seguridad, y así fue, pero ahora vuelven a cerrar, tuvimos que pagar todo, los alquileres luz, agua, sueldos, aguinaldos, etcétera, y gente como yo tuvo que vender el auto, y aun así mantengo deudas, no puedo terminar de pagar todo lo que debo, imagínate la situación de otros profes, y en toda la provincia, en la Asociación hay más de 120 gimnasios, gente de Curuzú, Goya, Mercedes, Paso de los libres, Esquina, Saladas, Empedrado, Itatí, Paso de la Patria, Virasoro, Ituzaingó, Monte Caseros, tal vez me olvido de algunos», sostuvo con angustia Farías.
«Imagínate la cantidad de gente que se volcó a la Asociación, para encontrar respuestas, tener un lugar donde recurrir para ayudas, hoy por hoy la asociación nuclea a todos, y se presentó un petitorio al Gobernador y a todos los intendentes donde los gimnasios están cerrados, porque necesitamos trabajar» aseguró.
Esta situación no cambia mucho, a pesar de la habilitación de la Municipalidad de la ciudad de Corrientes para que se trabaje al aire libre, en parques o paseos. Algunos gimnasios salen a trabajar a la vera y en las calles frente a sus locales. Sin tener las mejores condiciones y albergar a todos sus alumnos. Por lo que es un parche a la situación y solo en Capital. En el interior, se manifestaron para que se habiliten los gimnasios. Y la solución de fondo no aparece, tampoco las ayudas económicas podrían resolver las deudas que tienen.
CANCHAS
DE FÚTBOL 5
Por su parte, otro sector afectado por este retroceso de fase en marco de los numerosos casos de contagio de Covid-19, es el sector de las canchas de Fútbol 5, por ello EL LIBERTADOR dialogó con Fabricio Gómez Cabral, quien preside la Asociación de propietarios e inquilinos de estos complejos. «Estamos complicados, si se alarga para fase 3. Los costos se alejaron, al principio explotaron las canchas, en los últimos meses mermo un poco, solo se utilizaban algunas horas y eso es más dificultoso».
«Los árbitros y planilleros tuvieron tres meses de actividad y se cortó. Ahora estuvieron haciendo un arroz con pollo para juntar fondos para los que viven de eso» comentaba Gómez Cabral, para demostrar un sector tercerizado afectado por esta situación.
«En general, no todos tienen escuela o campeonatos, viven del alquiler de las horas y así con pocas horas habilitadas y los horarios de trabajo de la gente, quedan pocas horas disponibles».
«La mayoría de los predios se alquilan, o se vendieron», confirmó el titular de la Cámara de Canchas. «Si se prolonga, será muy dificil sobrellevar los costos, espero no sea tanto tiempo, veníamos agarrando ritmo, los más afectados son los profes y referees».
También se refirió a los horarios, ya que se complica por el uso de canchas. «Hay muchas horas libres a la tarde, las horas pico es de noche y ahora hay limitaciones, que dificultan mucho. «Somos conscientes de que se puede extender una o dos semanas, más se complicaría mucho», finalizó el profe.