Ayer por la tarde, alrededor de las 19, Dino Nicolás Meneses, un efectivo de 29 años de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, circulaba en auto por las calles de la ciudad de Zárate hasta que llegó a una estación de servicio ubicada en la esquina de la Avenida Gallesio e Hipólito Yrigoyen. No lo sabía pero en ese momento estaba siendo perseguido por agentes de la DDI de Zárate-Campana, que inmediatamente lo abordaron y lo detuvieron.
La captura se produjo en el marco de la investigación del violento asalto a una carbonería en el que fueron asesinados a balazos el oficial Osvaldo Osmar Cantero (25) y el peón Luciano Padrón (22). Meneses está sospechado de ser uno de los delincuentes que ingresaron a ese predio y atacaron a los dueños, a los empleados y a los uniformados que acudieron ante la emergencia. El caso es investigado por Andrea Palacios, fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 7 del Departamento Judicial de Zárate-Campana.
Según señalaron fuentes con acceso al expediente a Infobae, principalmente hubo dos pistas que condujeron las sospechas hacia Meneses. Una es un identikit confeccionado por las autoridades a partir de las declaraciones de los testigos. La otra es que, de acuerdo a lo relatos de las víctimas del asalto, uno de los atacantes tenía una “tonada correntina”.
Cabe resaltar que Meneses es conocido en su entorno como “El Correntino” y tiene uno de sus domicilios registrados en la ciudad correntina de La Cruz. Lo registros previsionales, además, muestran que empezó a integrar la Policía Bonaerense desde agosto de 2015.
Meneses se encuentra ahora alojado en un calabozo de la sede de la DDI de Zárate-Campana. En el transcurso de este sábado, la fiscal Palacios pidió la detención formal y el sospechoso será indagado en las próximas horas. Sería bajo la acusación de homicidio criminis causa, o sea, matar para ocultar otro delito, y agravado por ser una de las víctimas un miembro de fuerzas policiales. Por el momento es el único arrestado.
Mientras tanto, familiares, amigos y compañeros se acercaron a un edificio municipal de San Pedro para darle el último adiós al oficial Cantero en una emotiva ceremonia. Los restos del policía fueron inhumados en el cementerio Portal de Paz de la ciudad de Baradero. En tanto, los restos de Padrón iban a ser sepultados hoy en el cementerio municipal de Escobar.
EL DOBLE CRIMEN
El intento de robo y posterior tiroteo se desarrolló alrededor de las 20 del jueves en una carbonería ubicada en el kilómetro 12.800 de la ruta provincial 193. Al menos cuatro delincuentes ingresaron al predio de la carbonería por el sector trasero, atravesaron un campo y se dirigieron a la casa principal.
Al percatarse del asalto, la hija del dueño alcanzó a darle aviso a su padre, que se estaba duchando, según los primeros datos de la investigación que comunicaron fuentes policiales a la agencia Télam. El hombre escapó del lugar por una ventana, saltó por un balcón y fue a la vivienda donde residen los empleados, que salieron a ver qué sucedía y fueron atacados. Mientras tanto, hubo un llamado al 911 y un patrullero llegó al lugar rápidamente.
En el lugar se desató un enfrentamiento armado. Cantero recibió un disparo en el costado izquierdo del abdomen y murió apenas llegó al hospital. Además, otro efectivo resultó herido al ser impactado por una bala en su pierna derecha a la altura del muslo. El peón de 22 años, por su parte, fue ejecutado de un disparo en la cabeza en medio del caos. No está claro aún por qué lo mataron a sangre fría. Se presume que forcejeó con uno de los ladrones.
La tensión del ataque quedó plasmada en los audios de las comunicaciones radiales entre los uniformados que estaban a los tiros en la carbonería para evitar el robo y el comando central de la Policía Bonaerense.
En una de esas grabaciones, a las que accedió Infobae, se puede escuchar a la agente S.A. advertir acerca de la cantidad de delincuentes con los que se estaban enfrentando y que cuando concurrieran al lugar para brindar asistencia, lo hicieran con todos los recaudos necesarios.
“Tengan precaución, todo el mundo con chalecos antibalas. Por favor. Son muchos masculinos. Por favor. Tengan precaución”, expresó la oficial en una de las comunicaciones. “Son muchos masculinos, por favor jefe”, continuó en otro tramo.
También llega a escucharse parte de la respuesta desde el comando central, cuando le informan que ya hay móviles de apoyo y ambulancias en camino. “Mandame el apoyo de Vial, mandame el apoyo de Vial”, dice un policía. Finalmente, la uniformada S.A. llegó a relatar parte del tiroteo y cómo actuaba la banda. “Por lo que vi, está dentro de la casa con toda la familia, ¿sí? Se produjo en un enfrentamiento armado desde adentro hacia afuera. Está todo el personal afuera”, contó.
De acuerdo a fuentes de la investigación, los delincuentes huyeron por la Ruta 9, sentido a Escobar, a bordo de un Volkswagen Up de color rojo.
Fuente: Infobae