Hace tan solo unos meses, en El Libertador hablábamos de Caá Catí, y de cómo se convertía en una de las localidades del interior provincial que ya tenía todo listo para recibir la fibra óptica. Pues bien, lo cierto es que esta tendencia tiene que generalizarse cada vez más en un entorno tan basto como el que ocupa el país de la Argentina.
Existen muchos motivos para llevar una conexión de calidad a las zonas rurales, distanciadas de ciudades o de características más inaccesibles, y es que, en la actualidad, nos guste o no, es difícil que pueda producirse un desarrollo social, económico y tecnológico acorde al resto del planeta si no se dispone de internet.
Lo cierto es que los seres humanos estamos cada día más ligados al uso de tecnología, y no se trata exclusivamente de cuestiones básicas, como la comunicación por mensajería o las videollamadas, sino que se ha creado toda una red de posibilidades entre las que se encuentra la formación, el trabajo y, por supuesto, el ocio.
Son muchas las personas que durante los últimos meses han decidido trasladar su trabajo, puesto que lo desempeñaban desde su casa, a otra parte del país, o incluso del mundo. Muchos se han decantado por entornos más tranquilos y en contacto con la naturaleza… pero, bien seguro, la mayoría de estos lugares disfrutan de una buena infraestructura y conexiones de internet de calidad.
La posibilidad de llevar a cabo muchos de los principales empleos que predominantes hoy en día a través de cualquier lugar que disponga de internet, hace que este tipo de infraestructuras se conviertan en indispensables para el desarrollo, e incluso la supervivencia, de las zonas rurales.
En cualquier caso, más allá del propio trabajo, está el entretenimiento. El sector del ocio se ha convertido en uno de los más importantes en esta era digital, y es que somos muchos los usuarios que recurrimos a ocio a través de nuestros televisores inteligentes, nuestros dispositivos móviles o nuestros smartphones. Por ejemplo, los casinos físicos han dejado paso a las plataformas digitales, que nos permiten disfrutar de ofertas como los bonos de casino de VegasSlotsOnline. Estas plataformas albergan algunos de los mejores casinos de la red y proporcionan todo tipo de descuentos, tiradas gratis y otros tipos de ofertas en sus bonos. La facilidad con la que los usuarios pueden acceder a estos servicios, la comodidad e incluso los beneficios, hacen que el sector del juego online haya crecido vertiginosamente durante los últimos años y evidencia una tendencia creciente entre la población: destinar gran parte de nuestro tiempo de ocio a productos digitales de entretenimiento.
Por último, aunque no menos importante, nos encontramos con las posibilidades de formación que ofrece una buena conexión de internet a los habitantes de una región. Desde cursos especializados de todo tipo hasta estudios universitarios, pasando por una interminable oferta de formación online que puede permitir a cualquier persona, con un poco de esfuerzo, llevar a cabo aquello que se proponga desde prácticamente cualquier lugar del mundo… siempre que tenga internet. Un claro ejemplo de esto son las carreras online de la Universidad de Palermo, con sede en Buenos Aires. Dentro de la amplia oferta académica que proporciona esta institución y que se puede llevar a cabo exclusivamente a través de internet nos encontramos con licenciaturas como Administración de Sistemas y Empresas, Recursos Humanos, Management de Negocios Digitales, Periodismo, Marketing, Ciberseguridad o Inteligencia artificial; y hasta con una maestría en Tecnología de la Formación y un doctorado en Psicología, entre otras muchas opciones formativas.
En definitiva, la implementación tecnológica ha pasado a ser una parte indispensable del desarrollo económico y social de una región, y sin una buena infraestructura de comunicaciones que posibilite una buena conexión a internet es muy difícil que la población aumente a través de desplazamientos a la zona o acoja un creciente turismo, que sus ciudadanos puedan estar bien informados (y formados) o que disfruten de ocio digital de calidad y, sobre todo, que puedan desarrollarse en igualdad de condiciones con otras zonas urbanas del país.