Las ventas minoristas por el Día del Niño mostraron una cara de doble filo: si bien la caída en unidades fue de apenas un 0,3 por ciento en comparación con el año pasado, una cifra que sugiere un estancamiento, el poder de compra de los argentinos reveló un deterioro mucho más profundo. Según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), el valor real de los regalos fue un 21,1 por ciento más bajo que en 2024, evidenciando que la inflación obligó a las familias a ajustar drásticamente sus presupuestos.
Este resultado, que surge de un relevamiento en 180 comercios de todo el país, frena la abrupta caída del 14,4 por ciento registrada en la misma fecha del año anterior. Sin embargo, lejos de ser un síntoma de recuperación, el informe subraya que el consumo se mantuvo a flote gracias a sostenes artificiales: más del 87 por ciento de los locales ofreció promociones agresivas y la tarjeta de crédito, en planes de 3 y 6 cuotas, fue la protagonista absoluta de las transacciones.
El dato más contundente es la trampa del ticket promedio. Aunque el desembolso por compra fue de 33.736 pesos, superando los 31.987 de 2024, al descontar el efecto de la inflación interanual, esa cifra representa una pérdida real de poder adquisitivo del 21,1 por ciento. En otras palabras, se gastaron más pesos para comprar regalos de menor valor.
«La fecha funcionó más como una oportunidad para liquidar stock que como un verdadero impulso de consumo», señalaron desde la Came. Factores como el feriado previo y la cautela general de los consumidores limitaron el impacto de una de las jornadas comerciales más importantes del año para varios sectores.
RUBRO POR RUBRO
El comportamiento de las ventas no fue homogéneo y reveló distintas realidades según el sector. El rubro de Calzado y marroquinería fue el que mejor desempeño tuvo, liderando la recuperación con una suba del 5,3 por ciento interanual y el ticket promedio más alto de la jornada, 45.413 pesos, financiado mayoritariamente en cuotas. De manera similar, Indumentaria y accesorios registró un modesto crecimiento del 3 por ciento, aunque los comerciantes admitieron que sin el estímulo de las tarjetas de crédito el resultado habría sido muy diferente.
Otros rubros clave para la fecha mostraron un claro estancamiento. Las Jugueterías, tradicionalmente las protagonistas, apenas crecieron un 1 por ciento, con una afluencia de público menor a la esperada y una clara preferencia por productos económicos. Por su parte, el sector de Equipos de audio y video se mantuvo prácticamente estable, con una suba casi imperceptible del 0,4 por ciento, donde la financiación fue indispensable para poder concretar ventas de mayor valor.
En el extremo opuesto, el gran perdedor de la jornada fue el sector de Librerías, que sufrió un desplome en sus ventas del 14,5 por ciento. Con el ticket promedio más bajo de todos los rubros analizados, de 27.194 pesos, los comerciantes reportaron que los clientes se volcaron exclusivamente a libros de bajo costo, lo que impactó de forma directa en la rentabilidad del sector.