El senador nacional por el PRO, Humberto Schiavonni visitó Corrientes, donde fue presentador del libro «Frondizi, el estadista incomprendido», obra del ex embajador en Israel y Costa Rica, Mariano Caucino.
Con sala repleta, en la Federación Económica de Corrientes (FEC), de autoridades, empresarios e historiadores, el presidente de bancada del PRO dialogó con EL LIBERTADOR y puntualizó algunos aspectos, tanto sobre el desarrollismo como de la ajetreada agenda electoral que tiene el país.
¿Cuánto se pueden aplicar las ideas de Frondizi en la Argentina actual?
-Tranquilamente se pueden volcar estas ideas que tienden al progreso tecnológico, científico y social de la comunidad. Hay que adaptarlo a los nuevos tiempos, pero tuvo, Frondizi, un ideario muy vigente. Lamentablemente nuestro país ha ido involucionando en muchos aspectos, con políticas erráticas que han destruido el tejido social, productivo y económico. Hay que retomar conceptos y políticas para generar los cambios estructurales que le hacen falta al país.
¿Hay muchos prejuicios cuando se habla de apertura al exterior o globalismo?
-Afortunadamente, quienes atacan estas realidades son cada vez menos. La integración al mundo moderno, la llegada de inversiones y la ampliación de conocimientos se van mostrando como algo imprescindible para que el país salga del pozo en el que lo metió, especialmente, el kirchnerismo.
Usted es referencia en la oposición ¿Cuáles son los puntales propositivos?
-Este oficialismo populista nos deja los peores indicadores, en todo, en salud, educación, economía, e inserción internacional. Rememorando a Frondizi vemos que otra nación es posible y es lo que queremos plasmar desde Juntos por el Cambio.
Sin embargo puertas adentro hay diferencias entre opositores.
-Es muy saludable. Somos un amplio arco democrático, tenemos matices y visiones que pueden no coincidir pero que tienen algo en común: abandonar este populismo despilfarrador que sólo genera pobreza, inflación y más deterioro en la calidad de vida de los argentinos.
Como hombre del PRO ¿Se inclina por algunos de los precandidatos?
-Estoy trabajando con Patricia Bullrich desde hace tiempo y tenemos en claro las realidades provinciales y regionales de este país. La gente común, el emprendedor, el empresario y la juventud nos apoyan, vayamos donde vayamos. Es una dirigente de convicciones claras, sólidas y con perspectiva a futuro. Es lo que falta hace años en el Gobierno nacional.
CONTEXTO
El dirigente misionero dio introducción a este nuevo libro de Caucino, el cual aborda con agudeza la gestión turbulenta pero visionaria de un mandatario nacido en tierras correntinas.
Caucino es especialista en Relaciones Internacionales y tiene gran predicamento en el partido creado por Mauricio Macri, quien ya lo baraja en Cancillería, de ganar Juntos por el Cambio las próximas presidenciales.
Como moderador estuvo Carlos César Hernández, director del Club de la Libertad.
La disertación fue organizada por la FEC, el Centro de Estudios para el Desarrollo Federal y Fundación Club de la Libertad.
«La historia funciona por analogía, no por repetición. Yo creo que, para un político, estudiar historia es el equivalente a un deportista que se entrena. Frondizi tiene la dosis de pragmatismo adecuada, y hay un tema positivo en su figura, que es la idea de la integración con el peronismo. La unidad de los argentinos es un dato fundamental. Lo que ahora se llama grieta, es la versión 2022 de la división entre unitarios y federales, entre rosistas y antirrosistas, entre el interior y Buenos Aires, entre el radicalismo y los conservadores, entre el peronismo y el antiperonismo. Hay pocos momentos en la historia argentina donde hubo intentos por unir al país: uno fue Urquiza, otro Lonardi -y lo voltearon a los dos meses y vino un gobierno ultragorila-, otro fue Frondizi, y otro fue Menem, que canceló el odio entre el peronismo y antiperonismo. Pacificó el país. El kirchnerismo volvió a dividirlo», expresó el diplomático, a modo de conclusión.
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