La transformación digital es un hecho en todo el globo terráqueo. Es cierto que la segmentación social detiene el acceso general a medios y dispositivos. Sin embargo, avanza la democratización de los recursos digitales porque ya se volvió una necesidad.
Con la experiencia de la pandemia, la sociedad se vio obligada a amigarse con las alternativas a la presencialidad. Esto, con el retorno de la normalidad, se mantuvo porque en muchos casos implicó una serie de ventajas que hoy nos lleva a preferir resolver muchas gestiones de forma virtual.
A continuación, hacemos un repaso por las principales cualidades de los trámites en línea que hoy nos llevan a elegir las soluciones digitales.
Disponibilidad
Una de las mayores ventajas de las gestiones virtuales es que muchas plataformas están habilitadas las 24 horas. Así, no dependemos del horario de apertura de un comercio u oficina.
Si necesitamos dinero un día feriado, podemos revisar las mejores opciones de préstamos online con cbu y percibir el dinero en pocos minutos. También podemos hacer una compra en el supermercado para el día siguiente o pagar nuestras cuentas sin depender de una caja.
Accesibilidad
Para muchas personas, la transformación digital acarrea grandes cambios en materia de inclusión. Para empezar, ayuda muchísimo a facilitar gestiones para personas con problemas de movilidad. Lo mismo ocurre en casos de discapacidad visual, gracias a los lectores de pantalla.
Por otra parte, muchas veces las distancias y recursos son limitantes. Hoy, es sencillo resolver muchas gestiones con solo tener un dispositivo conectado a internet.
Agilidad
La optimización de los procesos que posibilitó la transformación digital evidenció la agilidad de resolver trámites en línea. Al ahorro de tiempo en transportarse, se suma la rapidez de los sistemas virtuales para analizar bases de datos y cruzar información en segundos.
Economía
En la mayoría de los casos, los trámites online nos ayudan a ahorrar. Lo más obvio es el gasto en combustible o transporte que evitamos. Esto va de la mano con no tener necesidad de pedir horas fuera del trabajo.
Al realizar compras, por ejemplo, la virtualidad posibilita ver opciones y comparar precios en poco tiempo. Además, muchos sitios web tienen ofertas exclusivas para venta online.
Perspectiva
Las posibilidades de la presencialidad se limitan a lo que podemos lograr con el tiempo y desplazamientos posibles. Además, a veces no logramos siquiera comprender qué opciones tenemos.
Al ingresar a una tienda virtual o un portal de trámites, en cambio, notamos la gran cantidad de opciones. A medida que detectamos las pestañas y cartelería, nuestras opciones se amplían y conocemos en detalle cada servicio.
Seguridad
Realizar compras, inversiones o solicitar créditos implican situaciones de riesgo, que son totalmente evitables en el formato en línea. Es mucho más seguro recibir o debitar dinero en nuestra cuenta.
Además, otra ventaja de realizar trámites en línea es que tenemos acceso a toda la documentación y comprobantes involucrados. Ante cualquier duda, es posible revisar el historial de movimientos y dar con los detalles.