Las cotorras son uno de los animales silvestres que más se trafica en Corrientes.
Hace poco, se rescataron diez pichones en la ciudad de Alvear y que fueron trasladados a Paso de la Patria, mediante un «sistema de postas» de móviles policiales.
Desde el Centro de Conservación Aguará, se destacó mediante una publicación que «las cotorras llegan en condiciones de hacinamiento, deshidratación, heridas, sucias, con hambre y mucho miedo».
Además, mencionaron que desde hace meses vienen recibiendo esta especie de aves, decomisadas por la Policía de Corrientes, destinadas a la venta ilegal.
También nombrado como el «loro hablador», su demanda para ser mascota es generalizada en varios hogares, por su ciclo vital, los pichones surgen a fin de año.
Estas aves no son animales domésticos ni de criadero, en realidad, son secuestradas de su hábitat natural, llevándolas así al peligro de extinción.
¿QUÉ ES EL TRÁFICO ILEGAL?
Es la captura y comercialización (por medios como ferias, comercios, redes sociales, entre otros) de especies silvestres, por los cual estas actividades están prohibidas.
Existen leyes y convenios nacionales e internacionales que prohíben estas prácticas, pero hay mucho por hacer en materia de información y participación de actores involucrados en el control y fiscalización.
También, en la comunidad, ya que muchas veces se desconoce el daño que el tráfico ilegal de fauna ocasiona, así como el verdadero origen de los animales.
ONG DE AVES ARGENTINAS
Cecilia Maqueda es coordinadora del programa Tráfico Ilegal de Fauna Silvestre en Aves Argentinas, y charló con EL LIBERTADOR acerca del tema.
Mencionó que el tráfico a nivel mundial «ocupa uno de los primeros puestos dentro de las principales actividades ilícitas, luego de la venta de armas, drogas y trata de personas. Asociadas frecuentemente a otras, como el lavado de dinero, corrupción y falsedad de documentos».
A nivel país «gran parte de los animales silvestres capturados ilegalmente (alrededor del 60 por ciento son aves) tienen como destino final el mercado de mascotas y/o colecciones privadas. A su vez, pieles, cueros, plumas y otros subproductos son objeto de una gran demanda, tanto nacional como internacional», comentó Cecilia.
Las principales formas de vender es a través de las redes sociales y algunas ferias, «en las redes existen usuarios, grupos y páginas de compra-venta donde se ofrecen animales silvestres con total impunidad. Los controles son escasos o nulos y las ventas ilegales en estas plataformas no sólo siguen vigentes, sino que cada vez están en mayor auge», agregó.
DIAGNÓSTICO
Desde la Organización no gubernamental de Aves Argentinas, la información que se obtuvo a través de un relevamiento realizado por voluntarios del programa Tráfico Ilegal entre enero de 2020 y agosto de 2021 fue que la cotorra se encuentra en la posición 7° de las especies más traficadas.
«En un estudio que realizamos en 2021 sobre la venta de aves en Facebook, comparando con el estudio realizado en 2015, hubo 585 por ciento de incremento en la cantidad de publicaciones, registrándose 44 especies más de animales ofrecidos (incremento del 88 por ciento), lo que deja plasmado de manera alarmante un aumento de ventas en los últimos años. Estos datos abrumadores representan sólo una pequeña parte de lo que realmente ocurre en las redes, pero logran demostrar la complejidad de este delito que amenaza a la fauna silvestre, y que provoca, de forma silenciosa, un daño grave al ambiente», expresó la coordinadora.
COTORRA O LORO HABLADOR
Cecilia también se refirió a esta especie «dentro de las 20 especies de aves más traficadas en nuestro país se encuentran las cotorras, que son los psitácidos más capturados junto con los loros habladores y los loros barranqueros. Cabe mencionar que si bien, las poblaciones de las cotorras son abundantes, las otras dos especies de loros citadas se encuentran en estado de vulnerabilidad en cuanto a su conservación. Esto no quita las consecuencias que genera la extracción de cotorras (o de cualquier especie silvestre) de su hábitat tanto en el medio ambiente como para los individuos. En algunos casos, las cotorras suelen ser desteñidas con algún producto químico para ser vendidas como animales «exóticos», lo que las lleva a enfermarse o morir prontamente».
Se estima que «nueve de cada diez individuos capturados mueren antes de llegar a destino debido a las malas condiciones (maltrato, hacinamiento, falta de alimentación, etcétera) desde que se los captura y se los transportan hasta que llegan al punto de venta. Por eso decimos que el tráfico de fauna mata más de lo que vende», agregó Maqueada.
ENFERMEDADES
Los animales silvestres al ser extraídos de la naturaleza pueden enfermarse y, por ende, contagiarnos.
Según la Organización Mundial de Sanidad Animal, 5 nuevas enfermedades humanas aparecen por cada año, 3 de las cuales son de origen animal.
Es así que la salud humana y la sanidad animal están estrechamente vinculadas y es necesario proteger a la fauna y preservar el futuro de todos.
Es importante resaltar, contó Cecilia que «la tenencia de animales silvestres como mascotas no sólo contribuye al tráfico ilegal de fauna, sino que también puede acarrear graves consecuencias para la salud pública. Los individuos, luego de pasar por las situaciones de estrés mencionadas, pueden portar patógenos capaces de transmitirse al humano. Por ejemplo, las aves pueden transmitir psitacosis, una enfermedad con posibles consecuencias graves».
DESDE NACIÓN
«La demanda de disponer fauna silvestre como mascota es una de las tantas causas que fomentan esta actividad prohibida» menciona la Ley Nacional N° 22.421.
Las principales especies que se intentan traficar al exterior son en aves: el cardenal, federal, tucán y el loro hablador.
Las ecorregiones que poseen mayor biodiversidad y son más ricas en fauna autóctona y endémica son las zonas desde donde mayormente se trafica.
CÓMO AYUDAR
En caso de observar caza, trampeo, acopio o venta lo mejor es hacer la denuncia ante las autoridades competentes, nos mencionó la coordinadora.
En la página de avesargentinas.org.ar/trafico se puede encontrar un listado de los organismos a los que se puede enviar las denuncias de acuerdo a cada provincia. En muchos casos, se pueden realizar de manera anónima.
Es importante tener en cuenta también la importancia de no comprar animales por lástima, ya que de esta manera sólo se estaría alimentando el ciclo del tráfico y haciendo que se capturen más animales para la venta. Siempre hay que denunciar.
«Desde Aves Argentinas recomendamos que la mejor manera de disfrutar de las aves silvestres, y de la fauna en general, es observándolas en libertad», expresó Cecilia.
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