El Senado de la Nación aprobó con dos tercios de votos la ley de movilidad jubilatoria, estableciendo cambios al modelo propuesto por el Ejecutivo a través de un DNU. El proyecto establece una actualización mensual de las jubilaciones en base al último dato disponible del Índice de Precios al Consumidor (IPC), así como una compensación extra del 8,1 por ciento para garantizar la cobertura de la canasta básica del adulto mayor.
La votación fue 61 votos a favor y ocho en contra, con el acuerdo entre el bloque de Unión por la Patria (UxP) y la Unión Cívica Radical (UCR), y el acompañamiento de senadores del PRO y miembros de los bloques provinciales.
El senador Mariano Recalde, de UP, destacó que «el sistema previsional argentino está en crisis», y que «aprobar esta ley es un acto de justicia y de reparación». Recalde agregó que «en 2015, un jubilado compraba 49 kilos de asado, hoy 29. Es urgente que reparemos esta pérdida y este retroceso, porque los jubilados se lo merecen».
Por su parte, el senador Martín Lousteau, de la UCR, señaló que «el proyecto ajusta las jubilaciones mensualmente por inflación para que los jubilados no pierdan poder adquisitivo» y que «esto es importante porque desde 2017 las jubilaciones y pensiones perdieron un 45% de sus ingresos». Lousteau también criticó al peronismo por haber llevado a cabo la privatización de los fondos de pensiones y de YPF, destacando que «fue uno de los problemas principales que desarticuló nuestro sistema».
El proyecto también establece una cláusula gatillo anual que se aplicará automáticamente siempre que los salarios hayan subido más que la inflación, y un adicional del 50% de la variación entre el RIPTE (promedio de los salarios) y el IPC para habilitar la posibilidad de mejorar las jubilaciones en contextos de crecimiento económico. Además, incluye un mecanismo para evitar que la actualización de la canasta básica quede desfasada, estableciendo un mínimo equivalente a 1,09.
Durante el debate, algunos senadores propusieron modificaciones al proyecto, pero fueron rechazadas. El senador Vischi y Zimmerman propusieron que la cláusula gatillo anual fuera del 25%, pero no fue aceptado.