La comparsera de Arandú Beleza, Maria Nieve Garay manifestó en redes sociales su indignación por un cambio imprevisto en la última noche de los Carnavales Oficiales, siendo voz de un malestar colectivo entre agrupaciones por una «arbitraria e injusta decisión» de los organizadores del evento.
«De manera informal e intempestiva nos llega la noticia que unilateralmente y sin justificación alguna el último dia previsto para desfilar y disfrutar de nuestro carnaval no tendremos la posibilidad de hacerlo, siendo la única alternativa de ser parte observando y aplaudiendo desde afuera», comienza la publicación.
«¿El motivo? El día lunes 20 de febrero, dejará de ser puntuable para que desfilen nueve comparsas de distintas localidades de la Provincia más dos comparsas barriales. Mas allá de la sorpresa por lo injustificado del cambio de planes a quienes hacemos el Carnaval de la Capital Nacional del Carnaval y habiendo un contrato firmado hace meses de por medio que prevé otra cosa, recibimos la noticia vía WhatsApp«, continuó.
Y pasó a detallar la razón de la polémica: «Ahora bien, atención, a este desfile del lunes se suman cuatro de las nueve instituciones que conformamos el Carnaval Oficial de la Capital Nacional del Carnaval. Por designación divina (cual poder otorgado en la Antigüedad), Ara Berá, Sapucay, Imperio Bahiano y Samba Total, instituciones que respetamos de la misma manera que al resto de las nueve que no tendrán el privilegio de desfilar el lunes, es decir: Copacabana, Samba Show, Sambanda, Kamandukahia, quienes junto a Arandu Beleza, han sido desvalorizadas, rechazadas, irrespetadas con esta arbitraria e injusta decisión», reclamó.
«Cada uno de los 300 comparseros de Arandú Beleza tiene el mismo derecho de desfilar las 10 noches previstas de corso. Todos hacemos este carnaval, todos tenemos el mismo derecho, todos tenemos responsabilidades que cumplir y lo hemos hecho sin falla alguna en lo pautado por contrato. Es hora de entender que el cumplimiento contractual nunca es solo para una de las partes. Es hora de entender cuánto deja cada comparsero, colaborador, familia y cada institución«, concluye la publicación a la que se sumaron comentarios de apoyo y enojo.
«Es el único lugar del mundo en el que el comparsero gasta fortunas para construir su traje, y una empresa ‘organizadora‘ privada, da las órdenes de cómo, cuándo y dónde se pueden poner los trajes», manifestó uno de los usuarios de la red, y otro agregó: «Es una injusticia, denigrar y exiliarse a aquellas comparsas y agrupaciones que todo el año se esforzaron y pasaron cada cosa solo para asistir a los ensayos para que alfinal nos hagan esto. Pasamos frío, calor, lluvia, todo».
De la misma comparsa que Garay, Cesar Yhin Romero también apuntó en un audio a la discriminación hacia las «comparsas chicas».