El Gobernador sortea desde hace tiempo una interna feroz dentro de la UCR. Los aliados se encuentran agazapados viendo la belicosidad entre los correligionarios. En este pleito, ricardismo y valdesismo se cuentan las costillas. Así, Gustavo sólo ve en su hermano la posibilidad de asegurar la continuidad de su proyecto para candidatear. Apuntalamiento a la Comuna que los vio crecer, una clave para medir la imagen de su posible sucesor.
03-POLITICA-20«Valdés va más a Ituzaingó de lo que Ricardo iba a Mercedes». Así se despachó un dirigente radical ante la consulta de la agenda del mandatario provincial desde el comienzo de su segundo mandato. No es casualidad. Basta con preguntar qué le pasó a Colombi por desatender su pago chico. Lo perdió y fue acaparado por los de Cambio Solidario.
Más allá de que falten 3 años y medio para conocer al próximo Gobernador, en política las estrategias comienzan a tejerse con mucha más antelación. Por lo menos en espacios que sostienen el poder desde hace más de dos décadas, como la UCR y sus socios, no así la oposición (que navega en un limbo de controversias y acefalías de casi medio siglo).
Es así que no es casualidad que el mandamás correntino haga coincidir, cada tanto, su itinerario con la «Capital de la Energía». Ya no fue azaroso la disputa con Burna, un radical puesto por los radicales (vale la redundancia) que sintió el rigor del aparato oficialista, que lo despachó con la figura del hermano del Gobernador, obligándolo a recurrir a un engendro electoral para ir con la boleta de la alianza opositora.
Sí, apareció Juan Pablo. Una figura nueva en la órbita provincial, más allá de sus laureles dirigenciales de pago chico. Y de repente, las visitas a Ituzaingó comenzaron a tomar una asiduidad poco común.
La excusa formal la dan desde Gobernación, en cuanto a la relevancia de una fiesta como la de San Juan Bautista (por lo de ayer), así como la construcción del puerto (¿y el de Itá Ibaté?). Ni qué hablar del parque industrial. Todos motivos valederos, pero que a la vez habilitan la consideración de otras jurisdicciones, que bien podrían incluirse en la agenda de Gustavo como paso obligado gubernamental.
Sin embargo, su insistencia con el territorio ituzaingueño va más allá de la intención de favorecer a su terruño. O de establecer una cabecera de playa para el «pos 2025» en el Municipio, en caso de que la intentona de la Vicepresidencia de la Nación, con Rodríguez Larreta como Presidente no arroje resultados positivos, o que no pueda sostener los hilos del poder local detrás del Sillón de Ferré (¿o sillón de Colombi?).
«Es el único de su entera confianza», aseveraron en Salta y Mayo, en referencia a Juan Pablo. Y no fue un hecho común que el Gobernador eligiera su localidad, acompañado de su hermano, para lanzar munición gruesa contra Nación en las últimas 72 horas. Lo hizo evitando participar de una cumbre de gobernadores que se realizó en el Chaco el pasado viernes 24, donde se trataron cuestiones importantes, como la de la hidrovía Paraná, tema respecto al cual también despotricó desde Ituzaingó.
APUESTA A FUTURO
EN UN ESCENARIO
PARTICULAR
La idea sería ir tanteando el terreno. Observando las cualidades de un joven Intendente que se hizo cargo de una localidad pujante que, apuntalada por la inversión provincial (con algún goteo de la EBY) podría instalarlo en la consideración del electorado correntino.
Ello demandaría una tarea titánica. Es que se debe tener en cuenta la particularidad del electorado correntino, al igual que la distribución del mismo según las comunas. La mayor cantidad de votantes se concentran en pocos distritos, siendo clave los resultados que se obtengan en Capital, Goya, Paso de los Libres, Mercedes, Curuzú, Virasoro, Santo Tomé y otros pocos más.
No cualquiera, en esta época, «ingresa» en el conocimiento de la gente a la hora de optar por quién va a votar. Por algo Ricardo Colombi hubo uno solo. Se hizo conocer desde 2001 a esta parte en todo el territorio. Lejos estuvo de ser de los antiguos «dirigentes de escritorio». Este trabajo de hormiga, entre otras cualidades, le permitieron ubicar a Gustavo Valdés en 2017 como el caballo ganador.
El ituzaingueño aplicó la misma impronta. No se quedó quieto desde que asumió. Aunque en los últimos meses, las luces de Buenos Aires y el agigantamiento de su figura en la oposición nacional captaron su atención e intención.
Gustavo sabe que no le queda plafón para analizar una «re-re». Ni el mercedeño pudo conseguir el andamiaje para semejante cambio normativo. Por ello, debe buscar un «heredero» (o heredera) en medio de una disputa con Colombi que los tiene a mal traer a ambos.
Fuera de discusión
Algo que no se discute es que, para lo que se venga en 2025, la Vicegobernación seguirá en manos del ultra confiable líder del Partido Popular, que debe su permanencia al hecho de ser una de las pocas figuras previsibles de la política provincial.
Un detalle que
también se analiza
La paridad de género podría colaborar respecto a diluir un posible tándem Valdés-Valdés. Es más, el propio Gobernador la impulsa, sintiendo hasta el momento la estocada del ricardismo en la Legislatura, que frena un proyecto que también colisionó con la postura del justicialismo, de ampliar su aplicabilidad a todos los poderes del Estado.
De allí además se desprende otra variable estratégica: la aparición de una mujer en la candidatura mayor de 2025.
Es otra de las alternativas, pensando en traccionar con una oferta que instalaría a la primera Gobernadora de Corrientes. Esta posibilidad la lanzó el propio Valdés hace un tiempo. Y desde entonces resonó en los corrillos de la Rosada provincial. Es más, hasta hay una carpeta en la que se contempla la conveniencia de entrar a tallar el nombre de la doctora Garro, esposa del mandatario correntino para encabezar una fórmula.
Ello, en la residencia de avenida Costanera y San Martín es considerado como un plan B, aunque tampoco descartan que sea el A, según vayan indicando los tiempos y márgenes de maniobra de los cuales disponga.
Con todo este combo, el mandatario correntino transita este primer tramo de su segunda etapa como Gobernador. Falta mucho para 2025, pero desde EL LIBERTADOR se está al tanto de este tipo de detalles, que influyen en las prioridades de una gestión. En este caso, de un gobierno provincial.
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