Facundo Campazzo, uno de los mejores jugadores del baloncesto argentino, ha fichado con el equipo serbio tras no llegar a un acuerdo para regresar al Real Madrid. Y es que en ocasiones es necesario seguir la estela de lo que podemos llamar destino, para que acabe por llevarnos al lugar correcto.
Así, el argentino pasa directamente de la NBA a la Euroliga y de los Mavericks al Estrella Roja. La afición no se ha tomado este “regreso a su base” como un retroceso como tal, sino como una prueba para volver a ser el jugador al que nos tiene acostumbrados. Todo para hacer lo que verdaderamente le gusta: jugar y disfrutar del baloncesto.
Su anterior equipo, los Dallas Mavericks, le negaron la oportunidad de hacerse valer. Algo que resultó ser un punto crucial, un punto de inflexión para el jugador. Un hecho que, viendo lo que las mejores casas de apuestas deportivas Argentina reflejan en sus estadísticas, quizás no fue la mejor decisión del equipo de Dallas: solo hace falta comprobar cómo perdió una vez más contra el Cleveland en el último partido jugado el 14 de diciembre. La prórroga sentenció a un equipo que se quedaría fuera de los puestos de Play-Off después de haber conseguido solo 15 victorias en 30 partidos. En 9 posición en la tabla, los mejores expertos del en pronósticos, vaticinan un futuro complicado para los de Dallas. Según los propios aficionados, sin Luka Doncic de su parte, la suerte parece estar en otro bando.
Su futuro en Serbia
Tras estos importunos profesionales, la opción del jugador era volver a Madrid, pero por lo visto el destino no contaba con el permiso de Juan Carlos Sánchez, el presidente del club que no vio por parte del jugador una actitud que le hiciera cambiar de idea. Un jugador que parece haber priorizado la NBA y cuya vuelta ahora, no se ve factible ni por jugadores ni por público.
Con todo ello, el jugador argentino concluye por aceptar la oferta del Estrella Roja tras perder el Real Madrid su derecho a tantearlo. En principio, el contrato será por dos años con una salida “asequible” por parte del jugador. Algo propicio si decide que el Estrella Roja ya sea por su equipo o el ambiente, no está hecho para él.
Lo que está claro es que el argentino, tras casi dos años y medio sin rozar prácticamente el balón, necesita volver a sentir como la adrenalina y la sensación de llevar su juego al siguiente nivel le abraza de nuevo. Una nueva etapa para el jugador que esperamos seguir y en donde deseamos volver a verlo triunfar como de costumbre.