Investigadores de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Unne publicaron el primer reporte de Leishmania (Viannia) braziliensis, responsable de la presentación cutánea de la enfermedad, en un murciélago insectívoro hallado en la ciudad de Corrientes. Destacan que la identificación del parásito y su especie no implica ningún motivo de alarma para la población, sino que, junto a resultados previos, abre nuevas perspectivas de estudio sobre el rol de murciélagos en la mantención y/o transmisión de la enfermedad en la capital provincial.
La especie Leishsmania (Viannia) braziliensis es responsable del mayor número de casos de leishmaniasis cutánea en el continente americano, enfermedad causada por protozoos del género Leishamania que se transmite a los animales y seres humano durante la alimentación de insectos hembras del género Lutzomyia infectados con el parásito.
Existen evidencias sobre la interacción directa entre estos parásitos y los murciélagos, la mayoría de estos datos fueron reportados en Brasil, país donde existen muchos antecedentes sobre la cadena epidemiológica de la enfermedad y su relación con los quirópteros.
Pero son escasos los antecedentes que se conocen sobre la situación real de esta parasitosis en murciélagos que habitan Argentina, específicamente en la provincia de Corrientes.
En ese contexto, en trabajos previos, investigadores de la Cátedra de Salud Pública de la Facultad de Ciencias Veterinaria UNNE, luego de poner a punto diferentes técnicas de biología molecular para detectar la presencia de ADN del parásito Leishmania como también las especies L (Leishmania) chagasi y L (Viannia) braziliensis, habían demostrado sobre murciélagos la presentación de una alta prevalencia de la especie Leishmania (L) Chagasi causante de la presentación visceral que tiene como reservorio principal en zonas urbanas a los caninos.
Recientemente, el mismo equipo de investigadores concretó la primera detección de Leishmania (V) braziliensis, causante de Leishmaniasis cutánea, en un murciélago capturado en una zona urbana de la ciudad de Corrientes, identificado también por técnicas de biología molecular.
“Es importante aclarar que el haber identificado la especie de Leishmania circulante en quirópteros urbanos en la ciudad de Corrientes no es ningún motivo de alarma para la población, sino que, junto a previos resultados obtenidos en la misma especie animal y en diferentes órganos, abre nuevas hipótesis de trabajos de investigación en búsqueda de mayor información sobre el rol que cumplirían estos animales en el ciclo de la enfermedad en la ciudad de Corrientes, sin dejar de lado los aspectos positivos de su presencia en el equilibrio ecológico del ambiente”, destacan desde el equipo de investigación que realizó el hallazgo.
Señalan que la detección fue además posible por avances en el ajuste de técnicas de identificación más específicas en el plano local.
El estudio fue realizado por las doctoras Raquel Mónica Ruiz, Elsa Agustina Alegre y Gabriela Ramírez, docentes e investigadoras de la Cátedra de Salud Pública de la facultad de Ciencias Veterinarias de la Unne.
Los resultados del trabajo fueron publicados recientemente en la Revista Veterinaria (FCV-Unne).
DETALLES DEL ESTUDIO
El reporte del caso hace referencia al hallazgo, tiempo atrás, de un murciélago en el Campus Universitario Sargento Cabral, en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional del Nordeste (Unne, Corrientes, Argentina), dentro de un edificio destinado a la docencia, oficinas de diferentes cátedras y laboratorios.
El animal fue hallado en los pasillos del edificio encontrándose vivo al momento de su captura.
En el laboratorio de la Cátedra de Salud Pública de la Unne se procedió a la identificación del animal, comprobándose que era una especie del grupo trófico insectívoro, de la Familia Mollossidae género Mollosus especie molossus, de sexo macho y de un grupo etario juvenil.
En la inspección clínica, no presentaba signos compatibles con Leishmania, ni mostraba fracturas o mordeduras, hallazgos que pueden ser frecuentes en animales caídos tras tormentas o por depredación de felinos, respondiendo enérgicamente a las maniobras semiológicas.
Posteriormente, se realizó el muestreo obteniendo tejido del pabellón auricular para ser sometido a pruebas de biología molecular, donde luego se detectó la presencia del parásito Leishmania (V)braziliensis a través de la identificación de su ADN
MURCIÉLAGOS URBANOS
Respecto a la especie de murciélago, las investigadoras señalaron que Molossus molossus es una de las especies en las que ya se estableció el rol de la leishmania en regiones de Brasil, y se trata de una de las especies de murciélagos que se encuentran con mayor frecuencia en el área urbana domiciliaria y peridomiciliaria de la ciudad de Corrientes, donde poco se conoce sobre la relación epidemiológica de estos y la circulación del parásito y sus diferentes especies.
El otro aspecto destacable del hallazgo, reiteraron, es que se trata de la especie Leishmania (Viannia) braziliensis, que es predominante de áreas rurales en la provincia de Corrientes y la región NEA.
Ello debido a que, habitualmente en la zona urbana de la ciudad de Corrientes predomina la presencia de Leishmania (L) chagasis que tiene como principal reservorio a los perros y que ésta última especie nombrada también fue la que mayormente se detectó en murciélagos en previos estudios.
Por otra parte, consideraron de gran relevancia desde el plano epidemiológico que el resultado se obtuviera a partir de muestras de piel de las orejas del murciélago, pues la presencia del parásito en este lugar anatómico y en este tejido puede favorecer la infección de los insectos flebótomos al momento de producirse la hematofagia, es decir la picadura del insecto a los animales, y facilitar de esta manera la dispersión del parásito en otros individuos.
Si bien estos resultados no proporcionan evidencias para inferir un rol en la presentación de la enfermedad, para el equipo de investigación sí se debe destacar la importancia de la estrecha convivencia de estos y el hombre con la mayor posibilidad de transmisión de enfermedades.
AVANCES EN EL CONOCIMIENTO DE LA ENFERMEDAD
“Como conclusión podemos destacar que, al tratarse de una enfermedad de gran complejidad eco-epidemiológica, el haber identificado la especie de Leishmania circulante en quirópteros urbanos, proporciona nuevos datos que permitirán avanzar en el conocimiento de la epidemiología de esta parasitosis en la zona de estudio” resaltó Ruiz, docente titular de la Cátedra de Salud Pública.
Sostuvo que la identificación es fruto de la línea de estudio que viene llevando a cabo el grupo de investigación en pequeños mamíferos de hábitos urbanos (roedores-quirópteros) buscando profundizar y establecer el conocimiento de la epidemiología de esta parasitosis en la región.
Recordó que, en Argentina, las provincias del nordeste, principalmente Corrientes y Misiones, presentan la mayor prevalencia de leishmaniasis, tanto en animales como en seres humanos, lo cual torna necesarios la generación de conocimientos a nivel local.
Los murciélagos constituyen el segundo grupo de mamíferos de mayor distribución a nivel mundial, destacándose por presentar una gran diversidad de especies y adaptaciones a diferentes entornos entre los que se incluyen los ambientes urbanos.
Esa situación incrementa la probabilidad de contacto de los murciélagos con especies de flebótomos adaptados a zonas urbanizadas, de esta manera, se presenta un escenario de posible mantención del agente etiológico, es decir del parásito, en un ambiente determinado.
En ese aspecto, los resultados del estudio y de investigaciones previas sobre murciélagos y Leishmaniasis realizadas desde la Unne en los últimos años, junto a otros pocos en Argentina, constituyen actualmente las primeras piezas de evidencia del papel que los murciélagos podrían tener en el ciclo de la enfermedad en una zona urbana.
Según consideran desde el grupo de investigación, los estudios y hallazgos realizados hasta el momento sobre infección natural en murciélagos no son suficientes para considerarlos como reservorios de Leishmaniasis en la zona urbana de Capital, como sí lo serían los roedores.
No obstante, los murciélagos sí podrían ser posibles huéspedes putativos en situaciones eco-epidemiológicas especiales o jugar el papel de diseminadores de la parasitosis, roles que también contribuyen a la mantención de la enfermedad en una población.
Por ello, remarcan que las investigaciones que se desarrollan colaboran con la vigilancia activa que debe realizarse en diferentes especies animales involucradas en un ecosistema determinado, sumando criterios para la interpretación de un enfoque ecológico integrado.