La Viceintendenta ocuparía la titularidad del Ejecutivo municipal hasta que la Justicia determine la inocencia o culpabilidad del Jefe comunal. Una crisis política e institucional que, según algunos, podría derivar en la Intervención del Municipio. La sesión prosigue hoy a las 8.
03-POLITICA-12Horas decisivas en el plano institucional se vivían ayer en Mercedes, donde al final de la jornada se esperaba se formalice el desplazamiento del intendente, Diego Caram. El día se inició con una convocatoria a sesión especial, realizada por el presidente del Concejo Deliberante, Gerardo Condado, quien se cortó solo con una convocatoria cuyo tenor no fue previamente consensuado y que generó malestar dentro del propio espectro opositor, donde no pocos creen ver la mano del Jefe comunal operando desde adentro.
Lo que ocurrió en la víspera pareció dar razón a los que destacan la muñeca política de «Tape» que, en aparente minoría en el Concejo, logró extender ocho días la incertidumbre sin que se ejecute la suspensión ya confirmada por el fallo judicial.
Ayer, cada concejal fue notificado posteriormente sobre la documentación y el temario de la convocatoria. En ella, se hace mención a que se iban a considerar los expedientes vinculados a resoluciones judiciales que afectan al Jefe comunal y que determinaron su apartamiento del cargo, hasta que el Tribunal Oral de Mercedes, dé un veredicto sobre su inocencia o culpabilidad.
Lo que está claro es que los tiempos judiciales no concuerdan con los políticos ni los mediáticos y generan en la población expectativas, que no se ven satisfechas en un sentido u otro.
Al caer la tarde, unas 400 o 500 personas estaban frente al Municipio con el salón del Concejo cubierto de gente, y con Tape en la calle pasando revista a la tropa convocada a través de las redes sociales para acompañar la resistencia del Jefe comunal, que no da signos de cumplir con el mandato judicial y con una oposición donde es notoria la falta de coordinación y definición estratégica de los pasos a seguir.
Anoche, se esperaba que el cuerpo deliberante conminara al Intendente a apartarse de su cargo, basándose en lo fijado por el artículo 224 de la Constitución provincial, que taxativamente señala: «En los casos de procesos penales que involucren a los funcionarios comprendidos en el presente artículo, confirmado el procesamiento en segunda instancia por delitos relacionados con la función pública, se produce la suspensión inmediata en el ejercicio del cargo y la separación definitiva en caso de condena».
Ante este cuadro de situación judicial, todo indicaba que ayer mismo se tomaría juramento a la viceintendente, Juana Gauto, para que asumiera la titularidad del Municipio mercedeño hasta el fin del juicio contra Caram. En caso de que Gauto no asistiera al recinto o se retirara, la decisión era de que se la intimaría bajo apercibimiento, y que transitoriamente se hiciera cargo de la Intendencia el Presidente del Concejo para evitar la acefalía del Ejecutivo municipal que podría derivar en la Intervención de Mercedes. Una alternativa sobre la cual se trabaja en esferas legislativas, donde no ven con desagrado el ir y venir de concejales que no definen ni un rumbo claro, ni tiempos acordes con la gravedad institucional del caso.
En la primera semana del mes en curso, en una decisión unánime, la Cámara de Apelaciones de Mercedes resolvió ratificar el procesamiento del intendente Caram, que ya había sido dispuesto en primera instancia por la jueza, Margarita López Rivadeneira. La magistrada le endilgó incumplimiento de los deberes de funcionario público, peculado y falsificación de documentos.
Ello derivó de una denuncia presentada en 2019, donde se argumentaron irregularidades en el manejo de fondos de la Municipalidad.
Ayer, se dudaba si Caram iba a poder seguir gozando del beneficio de eximición de prisión, toda vez que éste se mantiene en la medida en que no exista riesgo de fuga o la posibilidad de que, en libertad, pueda obstruir o perjudicar la investigación, sea en el contacto con testigos o en la custodia de documentación interna del Municipio.
La conducta observada ayer al frente de la multitud y declaraciones radiales del Jefe comunal, habrían determinado que la Fiscalía analice el planteo del cese del beneficio, algo que sólo puede solicitar porque es resorte de la jueza que interviene en la causa.
Es conveniente recordar que los intendentes no cuentan con fueros como sí los legisladores.
DENUNCIAS
En reiteradas oportunidades, Caram había denunciado una constante persecución hacia su persona, refiriéndose a sectores políticos desplazados del poder comunal. Concretamente, la UCR alineada con Ricardo Colombi y su mentor Víctor Cemborain, que ahora reporta a Gustavo Valdés.
En el medio, la persistente versión de que podría haber dos arrepentidos decididos a negociar la reducción de la condena a cambio de aportar elementos de peso a la investigación.
El inicio del juicio oral y público contra Caram, así como de otros funcionarios se estima para febrero próximo, a cargo del Tribunal Oral Penal (TOP) de Mercedes.
El mandatario municipal quedó en jaque, en cuanto a la continuidad al frente del Ejecutivo, debido a los pasos administrativos judiciales que pueden apartar a un funcionario -en su situación- de la función al menos de manera provisoria.
Antes de la sesión de ayer, dentro del partido opositor, la Unión Cívica Radical, había un estado deliberativo que se trasladó a todo el Concejo.
El fallo dictado por la Cámara de Apelaciones de Mercedes dado a conocer dos días después del 190 aniversario del pueblo, pero consensuado días antes, abrió una serie de conjeturas sobre los pasos siguientes y cómo terminará una situación que tiene en vilo a los mercedeños, con proyección provincial.
En las últimas semanas, se especulaba con la posibilidad de que bajara a Mercedes un reputado penalista para reforzar la defensa. Se habló, incluso, de plantear la posibilidad de una casación contra el fallo del Tribunal de Revisión para que el Superior Tribunal analice su revocatoria.
Nuevamente, aquí la opinabilidad del tema. Los antecedentes no son favorables a abrir la instancia del Superior, más allá de que puede concurrir en queja, lo cual no implica que la sentencia no pueda ser ejecutoria, intertanto, por lo menos hasta que el Tribunal pida los autos o abra formalmente la queja.
Lo cierto es que, hasta ayer, se vivieron horas decisivas, con media biblioteca de un lado y media del otro, al igual que con un ambiente político caldeado, rodeado de una incertidumbre y cierto grado de desconfianza para con algunos concejales de la oposición sobre los cuales el Jefe comunal tendría un predicamento definitorio.
Con todo, el caso no es un secreto que tiene un andarivel político que pesa en este contexto.
En esto no ayudó al Intendente en jaque, que pertenece a Cambio Solidario, un partido aliado al peronismo, dentro del Frente de Todos, el haberse inmiscuido en la siempre difícil interna del justicialismo y del radicalismo, así como algunas operaciones con su partido de origen, el que lidera «Tato» Romero Feris, muchos de cuyos dirigentes acercados terminaron pagando el costo del enojo que ello originó en Encuentro por Corrientes.
En los últimos días, Tape Caram se pronunció, en más de una oportunidad, en torno a la interna del PJ y hasta llegó a proponer candidatos, mientras recorría la Provincia con un ramillete de dirigentes que promovían un espacio en el cual convivía otro extrapartidario, como el actual Intendente de Gobernador Virasoro, bastante activo en su llegada a dirigentes del PJ, pero que todos saben sigue militando dentro de un partido en el que no la tiene fácil, como que quizás uno de los pocos puntos de coincidencia entre Valdés y Ricardo pasa por la bolilla negra que le han puesto al hijo de «Rudy» Fernández, que en definitiva es quien está detrás de los movimientos políticos, por momentos audaces, del actual Intendente de Virasoro.
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