La sequía extrema y las altas temperaturas generan una preocupación constante debido al alto riesgo de incendios que hay en cada rincón de la provincia. La alerta máxima pasa, en estos días, por evitar el desastre que causaron los focos ígneos el año pasado, que afectaron a todo el territorio correntino.
Ayer, un incendio arrasó con una vivienda familiar y las pérdidas fueron totales o casi totales. Fue en horas de la mañana, cuando Bomberos Voluntarios debieron llegar hasta el barrio Nuestra Señora de la Asunción, en la Capital.
Los uniformados arribaron al lugar luego de tomar conocimiento de un incendio en un domicilio ubicado por las calles Santiago Zibelman y Renacimiento, donde tras arduas tareas consiguieron sofocar la totalidad de las llamas.
De acuerdo a las fotos publicadas por la Asociación Civil de Bomberos Voluntarios de la Capital, las intensas llamas consumieron casi todo a su paso y dejaron importantes daños materiales.
Por otra parte, sobre el kilómetro 1.039 de la Ruta Nacional N° 12, los agentes acudieron y lograron controlar un incendio de pastizales. Para dominar el fuego, se debió utilizar la autobomba y hasta fue necesario un avión hidrante que colaboró en el lugar.
INCONSCIENCIA
Además de la preocupación por las condiciones climáticas, también existe la inconsciencia de las personas que no acatan las órdenes. A la medianoche del domingo, en el barrio Laguna Seca, en inmediaciones de la calle Cartagena y la avenida Medrano, irresponsables tiraron pirotecnia por los festejos del Gauchito Gil y prendieron fuego una palmera de la calle.
Todo quedó registrado en un video que fue captado por un usuario que estaba a unos 50 metros aproximadamente, quien lo subió a las redes sociales y rápidamente se viralizó (se puede ver en el Instagram @diarioellibertador).
Las llamas alcanzaron un cable de luz, lo que provocó un apagón y generó la indignación de los vecinos de la zona.
ACTIVOS
Desde el Servicio Nacional de Manejo del Fuego, en su reporte diario, indicaron que en toda la provincia hay 13 focos ígneos, de los cuales uno se encuentra activo, en Ituzaingó, y los otros 12 están contenidos o controlados.
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