La realidad por la que atraviesan estas personas, suele tomar relevancia principalmente durante el invierno, con las bajas temperaturas. Pero más allá de la temporada, frío o calor, están ahí. Improvisando una cama sobre alguna vereda y buscando la manera de sobrevivir. Un grupo de jóvenes correntinos decidió no mirar para otro lado y pide donaciones para organizar una cena navideña.
“La idea es celebrar con ellos, porque sabemos que no cuentan con la oportunidad de tener una mesa navideña, y como nosotros somos parte de su familia, la idea es agasajarlos”, dijo Belén Lobato, voluntaria de El Buen Samaritano (BS) a EL LIBERTADOR.
La cena navidad, es una actividad que realiza todos los años el grupo solidario. En esta oportunidad necesitan productos de primera necesidad: azúcar; leche en polvo; arroz; yerba; aceite; budín; pan dulce; salsa de tomate; gaseosas o jugos. “La cena será pata muslo con arroz primavera, la idea también es armar una bolsita navideña”, detalló la coordinadora del grupo.
La cita será el sábado 17 a partir de las 21 en la Iglesia San Juan Bautista (Brasil 300). Y reunirá a los cuatro grupos que integran la red, tanto de la iglesia Jesús Nazareno, Catedral, San Juan Bautista y San Francisco.
Una problemática que crece
Belén es voluntaria hace tres años en “Sama”, y en base a su experiencia resaltó que creció la cantidad de personas que se encuentran en esta situación de vulnerabilidad. “La verdad es que cada vez hay más personas, no sólo en la calle. Si bien, el grupo es heterogéneo, hay muchos adolescentes y jóvenes. Muchos de ellos con consumo problemático, subrayó.
Ayudar, siempre
“El BS les ofrece una contención más que nada, una escucha, un baño, un ropero”, explicó Lobato. Para poder llevar adelante esta tarea, el equipo recibe donaciones de ropas, elementos de aseo personal, y meriendas. Que son entregadas de acuerdo al día de actividad que tiene cada grupo.
Lobato también agregó que la difícil situación puede percibirse si se observa la distancia que atraviesan las personas en busca de una merienda o cena. «Muchos son de barrios lejanos», enfatizó. Los viernes en la iglesia San Francisco, las actividades comienzan a las 18:30 y terminan a las 22:30. Durante ese transcurso las personas que llegan «pueden bañarse, mientras que se les prepara la merienda, y después se prepara la cena. A veces hay postre», concluyó.
Las personas interesadas en colaborar podrán comunicarse a los siguientes números: 3795 – 051352 (Belén Lobato), 3794 – 753910 (Nico Podesta), 3773 – 470306 (Nico Esquenazi). O también podrán acercar las donaciones a la secretaría de la Parroquia San Francisco Solano (Mendoza 468), de lunes a sábados de 8 a 12 y de 17 a 20:30.