Dos muertos y un derrame de combustible en una jornada sin escape dentro de una fila que se desplegó por hasta 130 kilómetros, constituyeron entre el viernes 14 y ayer sábado 15, un hecho inédito a la altura del kilómetro 663 de la ruta 14, que desnudó la falta de infraestructura vial y de herramientas para brindar soluciones de manera rápida y eficiente.
Luego de más de un día, la espera llegó a su fin, pero el cansancio crece. Detrás, sobre el kilómetro 663 de la ruta de la muerte, dos vidas menos, un derrame de combustible, y una tortura a cielo abierto entre Santo Tomé y Alvear para más de un millar de personas oriundas de numerosas provincias argentinas y de países limítrofes, se alinearon en un hecho sin precedentes para la región, alimentado por la imprudencia al volante y la desinversión en infraestructura vial.
Por la tarde del viernes, un camión cargado con troncos de pino conducido por un chofer identificado como Raúl Ibarra, oriundo de Colón, Entre Ríos, embistió a un cisterna de la Empresa EJE SA de Misiones, conducido por otro, identificado como Alberto Fedusca, que transportaba combustible. Ambos murieron en el acto. Desde entonces, sin aviso, hasta las 18 de ayer, nadie más pudo escapar a la inmovilidad de una noche sin atención ni asistencia a la emergencia de un bloqueo total y obligatorio ante el riesgo inminente de una explosión.
En pocas horas, la fila de vehículos serpenteaba por más de cien kilómetros. Desesperados, viajantes y automovilistas, personas descompuestas, con frío, hambre, sin baños, abrazados por la pestilencia del contaminante que penetró la tierra bajo la tragedia reclamaban asistencia de las instituciones de Defensa Civil y de los gobernantes de las comunas aledañas.
«El corte fue ordenado por los bomberos», se justificó a la requisitoria periodística. «En referencia al accidente, (la zona) está liberada desde anoche. Continúa cortada por el trabajo de bomberos, no por decisión mía», explicó a EL LIBERTADOR el Fiscal de Investigación de Santo Tomé, Facundo Cabral.
«Después de las tareas de peritajes de la policía y demás autoridades del orden, Los bomberos procedieron a retirar los desperdicios y luego a limpiar la cinta asfáltica del material inflamable. Liberaron la zona a las 18», señaló el director de Vialidad Nacional, Daniel Flores, un día después.
.