San Martín dominó la batalla táctica para derribar a Regatas y meterse en semifinales. Ganó 77 a 60 tras levantar en el segundo cuarto con un despliegue defensivo letal y cerrar el partido a pura eficacia y gol. Machuca, de nuevo, el verdugo con 17 puntos. El miércoles inicia la semifinal ante San Lorenzo.
El partido tuvo un ritmo de arranque de alto vuelo. Pese a no haber tenido tres ofensivas buenas al comenzar, San Martín se amigó con el aro y al cabo de tres minutos se puso 7-2. Regatas comenzó a empujar con la energía de Tabarez y la puntería de Fernández para empatar en 7 y desatar un palo a palo frenético.
El partido se trabó en ambos lados y bajó el goleo. Las zonas estuvieron impenetrables.
San Martín defendió bien las situaciones de pick and roll y Regatas cargó la zona para evitar el juego de los internos. El «remero» cambió energías terminando el cuarto sin su quinteto inicial. También recuperó buenas bolas y pudo correr la cancha. En el ataque estacionado cambio la forma de jugar animándose al uno contra uno.
Con el aporte de Giordano y Corbalán, los de celeste se escaparon en el cierre por 17-11.
Regatas defendió bien arriba a un San Martín que fue muy dependiente de Machuca. Primero con Corbalán, luego con Vildoza. Esto obligó a hacer ofensivas largas al santo que no fueron tan productivas. Del otro lado no pudo sacar ventajas por la buena defensa sobre Gallizzi. Las cosas se emparejaron con el correr de los minutos.
Al cabo de los primeros cuartos, todo se hizo palo a palo. Llegaron a este pasaje con la ventaja para Regatas 22-21.
San Martín abrió más la cancha y encontró tiros desde afuera. Así también tuvo pérdidas infantiles que Regatas aprovechó para anotar. El remero rompió bien la zona del rival con penetraciones tras buenos pick and roll.
San Martín no leyó bien los pick y perdió en el primer paso de las penetraciones de Carreras y Tabarez. Con estas distracciones, el «fantasma» se escapó 27-22. San Martín forzó muchas situaciones y encontró gol desde afuera ante una defensa hundida de Regatas para evitar la pelota a los grandes y las penetraciones.
El «santo» le encontró la vuelta sobre el final cargando la zona con Saiz y Acevedo para darle más libertad a los perimetrales.
De esta manera, anotó con García y Zanzottera para empatar el juego en 31 de cara al entretiempo. Regatas se fue a los vestuarios con dudas y errores a corregir por lo mostrado en el cierre.
A la vuelta del descanso largo, todo estuvo muy trabado. San Martín aprovechó el flojo 1-11 en triples de la primera mitad del rival y le dio el tiro. Regatas lo hizo al revés. Le negó el tiro y lo obligó a ir adentro con la marca de Acevedo y Basualdo.
El goleo de ambos bajó considerablemente. En 5 minutos, el parcial fue 6-7. San Martín convirtió de segunda oportunidad, mientras que Regatas encontró dos triples para poner las cosas 37-38.
San Martín jugó mejor el pick and roll y encontró gol desde allí con Acevedo y García.
Así se escapó un poco 43-39. Regatas puso un quinteto rápido con un solo interno (Caffaro) y encontró gol con el ex San Lorenzo y una ofensiva muy bien manejada por Giordano y Corbalán.
Supo leer muy bien la defensa en ¾ de cancha del rival y jugó la pelota abajo para anotar. El santo terminó mejor el cuarto. Dañó mucho con el ingreso de Machuca, que aparte de anotar tuvo la claridad para encontrar a Saiz y Acevedo para que anoten.
El parcial de los últimos 2 minutos fue 9-3 para los de Vadell que se fueron al descanso de cara al último cuarto ganando 52-47.
San Martín, con Machuca al mando, aprovechó la desesperación y el desorden táctico de Regatas para empezar a alejarse. Leyó bien las defensas, sobre todo con Acevedo y Basualdo que alternaron muy bien la marca en la zona para cerrar y evitar el juego interior. El goleo estuvo trabado en este pasaje.
El parcial de los primeros 3:30 fue 2-4 (47-56). Cuando parecía que Regatas podía reaccionar, el santo con su doble base hizo mucho daño. Siete puntos seguidos de Machuca y García alejaron al rojinegro a 14 puntos (49-63). Machuca rompió bien la zona aprovechando la ventaja y tuvo más oportunidades de generar juego.
Regatas tuvo poca claridad en ataque. Ante una defensa hundida buscó desde afuera y no encontró fortuna. Tuvo ofensivas cortas en la desesperación por anotar rápido ante la presión de un reloj que cada vez lo ahogó más. San Martín defendió muy bien, estuvo atento a los cambios y supo negar la entrada a la zona a un rival que se lo vio frustrado y ya de a poco, resignado.
En ataque jugó tranquilo y no se dio por aludido ante la presión en toda la cancha de los de Victoriano. Tuvo seis puntos al hilo de Zanzottera para seguir escapándose, esta vez llegando a la máxima de 19 a falta de 2:20 (51-70).
Regatas no pudo con la presión del santo. Se vio obligado a tirar de tres y no encontró respuestas en ningún lado. Los de Vadell fueron muy sólidos para cerrarlo muy tranquilo.
El resultado final fue 77 a 60 para San Martín y también la clasificación a semifinales, en las que va a jugar contra San Lorenzo a partir del miércoles.
