Así lo afirmaron desde la Asociación de Panaderos de Corrientes, con el objetivo de poder contener al personal ocupado. Además, finalizando marzo tuvieron incrementos entre el 12 y 21 por ciento en todos los órdenes de materia prima, insumos y sueldos. También aseguraron que el consumo en los clientes, prevalece el «signo peso».
La pandemia continúa mostrando las falencias económicas que atraviesa el país, y la escalada de precios no da tregua. Además, la inflación de marzo del NEA fue del 3.3 por ciento, según el informe emitido por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
«Sé que no es ni mucho ni poco, pero al que tiene que afrontar los costos, le cuesta», afirmó el referente de la Asociación de Panaderos de Corrientes, Nelson Arriola, en diálogo con EL LIBERTADOR.
En el sector, aseguraron que el kilo de pan ronda en los 120 pesos, y «quedamos lejos, el ideal sería un poco más arriba, pero que pasa, aumentamos precios y bajamos la producción y hay que contener al personal ocupado», advirtió.
MÁS PROBLEMAS
No ajeno a la realidad del costo, admitió que finalizaron marzo con un 12 y 21 por ciento de aumento en todos los órdenes de materia prima, insumos y sueldos. «Y evidentemente esto no para, la semana pasada nos informaron, un proveedor de materia grasa en general, de una de las firmas pionera que hay en la Argentina, ya me están hablando de un 16 y 20 por ciento de incremento ahora inmediato», indicó.
En ese sentido, Arriola deslizó que los aumentos repercuten en el producto final.
VENTAS
Respecto a las ventas, el referente sostuvo que depende del consumo, y que la gente opta y hace prevalecer el «signo peso». Y ejemplificó que «recorre la ciudad y vas a ver un cartel que te ofrecen el kilo de pan a 78 pesos, otro a 60, otro a 90, y así».
Resguardo de la fuente
laboral durante la pandemia
El referente de la Asociación de Panaderos de Corrientes afirmó que pese a la situación económica buscan la manera de resguardar al empleador. «En marzo, al personal le estábamos aplicando un no remunerativo desde la pandemia, y eso era un promedio de 4 a 6 mil pesos por mes, y ahora ese importe se le aplicó al básico», afirmó.
También aclaró que un promedio del básico del trabajo ronda en los 42 mil pesos, más lo que le conviene por convenio. «Por antigüedad hay que hablar un sueldo de 70 mil pesos de bolsillo, en promedio», resaltó.
En este sentido, Arriola se mostró preocupado por el bajo nivel adquisitivo que tiene la sociedad, donde asumió que «lamento que tengo un plantel de muchos años, incluso hay gente que se ha jubilado y quiere seguir trabajando porque tampoco le sirve para nada, y viene hacer una extra a media jornada, por darte un ejemplo, y esa gente está quedando con menos volumen de trabajo, y a mí me cuesta cumplir con todos».