Los profesionales nucleados en el Colegio Médico de Corrientes se plantaron ante una de las prepagas más poderosas del país, si no es la que más injerencia tiene en la materia dentro del círculo rojo (se agregaría a esta mesa chica Swiss Medical).
A través de un contundente comunicado, rubricado por el doctor Walter Pilchik, referente de los médicos, se expuso la tesitura asumida por Osde frente a sus reclamos. «Con la soberbia que los caracteriza, ha sido dar por terminado el convenio que los unía al Colegio Médico a través de una carta documento que, obviamente, será respondida», remarcó.
Resulta oportuno recordar que los profesionales correntinos exigieron que se aumentara el monto que se les paga por consultas y atenciones, resaltando una asimetría existente con otras provincias. A la vez, reclamaron que los pagos se realicen en tiempo y forma, advirtiendo que la demora en percibir el dinero correspondiente a la prestación solía superar los dos meses.
Ante la dilación de una respuesta o de una solución, en la última semana, los médicos correntinos decidieron cobrar a los clientes de Osde un canon de 1.800 pesos para cualquier consulta. Tras abonar dicha suma, los pacientes iban a recibir el recibo correspondiente para luego solicitar a la prepaga la retribución.
Sin embargo, al aplicarse la medida «de fuerza», desde la empresa comenzaron a aplicar estrategias evasivas a sus socios (ver aparte).
DIVIDE Y REINARÁS
Retomando el comunicado, Pilchik advirtió otra maniobra empresarial, en este caso sobre los médicos: «El epílogo de esto es que todos los socios que se encontraban colegiados no serán prestadores de la prepaga. Consecutivamente a este hecho, se han dedicado a llamar uno por uno a los prestadores directos de manera extorsiva y con manifiesta actitud mafiosa para ‘apretarlos’ y amenazarlos, inventando falsedades con el único objetivo de ensuciar la imagen del Colegio», denunció.
A esta movida, se le atribuyó un «éxito parcial», por lo cual desde Osde «se dedicaron a llamar a algunos prestadores para ofrecerles valores similares a los por nosotros solicitados; lo cual no hace más que demostrar que si no negocian es porque no quieren y no porque no pueden», advirtieron.
«Esta actitud revela otra muchísimo más importante: sin nosotros no son nada. Si demostramos valentía y solidaridad negándonos a ser sometidos, podremos poner nuestras condiciones. Si nos dejamos llevar por la codicia y el oportunismo, nunca podremos asomar la cabeza del pozo donde estamos sumergidos», exhortó el Presidente del Colegio, que agregó: «Por eso, les pido un sacrificio en pos de todos. Esto será paradigmático de aquí en adelante».
Pilchik hizo hincapié en los colegas que accedieron a la «impronta» de Osde. «Así, con esa actitud, seremos simples empleados de los gerenciadores por la eternidad», remarcó.
Maniobra con los clientes
Tras conocerse el cobro de $1.800 por las consultas. Un socio de Osde comentó a este medio que llamó a la firma prestataria para consultar cómo y cuánto demoraría el reintegro. Sorpresa le causó la respuesta de la operadora, puesto que la misma le señaló: «Vamos a ver cuánto se le va a reintegrar de esos 1.800 pesos». Aún estupefacto por notar que ya se estaban queriendo desligar de la situación latente, por la negociación hostil entre los médicos y esta empresa, recibió una recomendación aún más exasperante. «Si no es de urgencia, le recomendamos que espere para ir al médico. Porque esto se va a solucionar en unos meses. O puede llamar a la secretaria de su doctor y preguntarle si es prestador directo, así evita pagar», agregó sin titubear.