La posición asumida por Daniel Scioli provocó un sacudón dentro del oficialismo nacional acaparado por La Cámpora. Es que su decisión de sostener su precandidatura presidencial, sumando a la albertista Victoria Tolosa Paz recrudeció la interna con el ultra kirchnerismo, desde donde salieron a marcarle las estrategias en el ámbito bonaerense con el tema candidaturas municipales.
Scioli y Tolosa Paz presentaron ante la Junta Electoral, con sede en La Plata, un planteo en contra del reglamento que busca imponer el hijo de Cristina, por considerar que vulnera la representación de las minorías y desalienta la participación en la interna.
En el sciolismo habían anticipado que iban a recurrir a la Justicia Electoral si no había acuerdo sobre la integración de candidatos y que estaban dispuestos a tensar la discusión si fuera necesario. Sobre todo, porque consideraron que el kirchnerismo actuó sin consenso de la otra parte y que lo único que buscaron fue anular la participación del sector que llegase a obtener menos votos.
Entienden que La Cámpora planifica «una estrategia perdedora» en la que «lo único que les interesa es sumar más diputados propios en las listas». Es decir, que no tienen una verdadera voluntad de conseguir el triunfo en las elecciones, sino más bien fortalecer su fuerza política en el ámbito legislativo.
El espacio que lideran el ex Gobernador y la Ministra de Desarrollo Social de la Nación hizo una primera presentación en el PJ y luego ante la Junta Electoral bonaerense que preside el juez Sergio Torres. Es decir, avanzaron por vías paralelas para frenar lo que consideran que es una embestida del kirchnerismo y se plantaron en la negociación por el reglamento.
El punto de conflicto es el lugar que tienen los legisladores de la minoría en la lista bonaerense que quedará conformada en las elecciones generales. El kirchnerismo instaló que el piso para que ingresen debe ser del 30 por ciento y que, en el caso de superarlo, el primer legislador que ingrese será en el escalón 6 o 7 de la lista, según si el primer puesto es de una mujer o un varón.
Los siolistas aseguran que el acuerdo que habían alcanzado era para que el piso sea de 30 puntos porcentuales, pero que el primero que ingrese sea en el cuarto escalón, tal cual se había cerrado para la integración de listas de diputados y senadores nacionales por Buenos Aires. Acusan al kirchnerismo de «no cumplir la palabra» y hacer una «nueva picardía» en la antesala del cierre de listas.
Un peso pesado decidido a jugar fuerte
El escrito presentado ante la Junta Electoral fue redactado por el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, quien se plantó en el escenario como apoderado legal de Scioli. Se trata de un jugador con peso propio que se animó a cantarle las 40 a La Cámpora, y que ante la posición tajante del Embajador argentino en el Brasil de sostenerse como precandidato, decidió jugar como sabe, fuerte.
De esta manera, se ocupó de dejar en claro en el texto presentado que «el derecho constitucional a la representación de las minorías implica que las listas de candidatos deben reflejar a distintos grupos internos partidarios para que en definitiva se asegure que la voluntad del partido sintetice la opinión del conjunto y no sólo la de la mayoría partidaria».
La presentación fue ejecutada por Javier Marcelo García y Víctor Eduardo Hortel, apoderados de la corriente interna Unidos Triunfaremos, por la que Scioli firmó su precandidatura presidencial. Las dos presentaciones son similares y apuntan al reglamento que el kirchnerismo avaló, con respaldo del massismo, pero que en el sciolismo aseguran que no fue en base al acuerdo que habían realizado con ellos.
En otro apartado del texto sostuvieron: «Entendemos que las elecciones primarias abiertas, simultáneas y obligatorias son una herramienta de participación eficaz que permitirá sintetizar, a través de la voluntad popular, una lista que refleje la pluralidad de visiones contenidas en la alianza Unión por la Patria».
A partir de ahí hicieron hincapié en la décima cláusula del acta constitutiva a la que consideran que «cercena la voluntad popular de los votantes, quienes luego de las Paso no verán reflejada en las listas su decisión ciudadana en forma proporcional y representativa».
Facilitaron avales al sector sciolista para la precandidadtura
Los representantes de los seis partidos mayoritarios de Unión por la Patria (PJ, Frente Renovador, Frente Grande, Kolina, Partido para la Victoria y Nuevo Encuentro), decidieron facilitarle los avales al sector de Daniel Scioli para que pueda presentar su precandidatura presidencial.
Como Daniel Scioli y Alberto Fernández no pudieron reunir los avales necesarios para sostener la postulación, desde las fuerzas mencionadas dejaron en claro que Máximo Kirchner, Mario Secco, Carlos Castagnetto, Martín Sabbatella, Rubén Eslaiman y Diana Conti acordaron en la tarde de ayer facilitarle los avales requeridos por la normativa vigente para entrar en la competencia electoral.
En un comunicado se encargaron de señalar que les «resulta sumamente extraño que alguien que aspira a conducir los destinos del país no haya conseguido los avales necesarios para ir a elecciones». Sin embargo, consideraron que «resulta más extraño aún que, incluso habiéndole facilitado dichos avales -sin los cuales no podría competir-, Daniel Scioli y Alberto Ángel Fernández hayan judicializado el reglamento que voluntariamente firmaron».
«La judicialización de la política, que el peronismo siempre condenó enérgicamente, no sólo entorpece el proceso electoral en un contexto de conflictividad creciente, sino que es absolutamente funcional a los sectores políticos y económicos que siempre han vulnerado los derechos de los argentinos y las argentinas», indicaron en un tiro por elevación disfrazado de tono bondadoso que no hizo más que ratificar la cruda pelea existente en el oficialismo nacional.
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