El costo de vida en el Nordeste argentino (NEA) mostró una notable moderación durante junio, registrando una inflación del 1,1 por ciento, una de las cifras más bajas de todo el país. Según el informe oficial publicado este lunes por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la variación de precios en la región que incluye a Corrientes, se ubicó medio punto por debajo del promedio nacional, que fue del 1,6 por ciento.
Este respiro en el índice general se debió, en gran parte, al estancamiento en el precio de los alimentos, aunque los aumentos en alquileres, servicios y restaurantes siguieron presionando el bolsillo de los consumidores locales.
Al analizar en detalle la situación del NEA, se observa que el rubro de mayor impacto fue «Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles», con un aumento del 3,0 por ciento. Sin embargo, la división que más subió fue «Restaurantes y hoteles», con un 3,1 por ciento. La noticia más relevante para la economía familiar fue que la división de «Alimentos y bebidas no alcohólicas» registró una variación nula, de 0,0 por ciento. En las góndolas de la región, esto se tradujo en precios promedio como el kilo de pan francés a $2.068,39, el pollo entero a $3.549,79 y el sachet de leche fresca a $1.686,03.
En el contexto nacional, la inflación de junio del 1,6 por ciento llevó la cifra acumulada en los primeros seis meses de 2025 al 15,1 por ciento. La comparación con el mismo mes del año anterior arrojó una variación interanual del 39,4 por ciento. Las principales divisiones que impulsaron el índice a nivel nacional fueron «Educación», con un 3,7 por ciento , y «Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles», con un 3,4 por ciento. Se mantuvo la tendencia de los últimos meses, donde los servicios, con una suba del 3,2 por ciento, aumentaron considerablemente más que los bienes, que lo hicieron en un 0,8 por ciento.
La desaceleración de los precios fue un fenómeno generalizado, pero con claras diferencias geográficas. La cifra del 1,1 por ciento del NEA fue la segunda más baja del país. Solo la región de Cuyo tuvo un registro menor, con un 1,0 por ciento. En el otro extremo, las regiones con la inflación mensual más alta fueron el Gran Buenos Aires (GBA), con un 2,0 por ciento, y la Patagonia, con un 1,8 por ciento.
Finalmente, al ampliar la mirada más allá del dato mensual, la región del Nordeste también presenta el mejor indicador en la comparación interanual. Con una variación acumulada del 37,1 por ciento en los últimos doce meses, el NEA se consolida como la región con la inflación interanual más baja de Argentina , un dato que contrasta con el 43,5 por ciento de la Patagonia, que se ubicó como la de mayor registro.

