La de hoy será una Nochebuena muy especial para la pequeña Ana de ocho años, a quien el juez de Familia, Edgardo Frutos, disfrazado de duende y con un hermoso cuento de Navidad le comunicó, hace pocas horas, que finalizó con éxito el trámite de adopción y será parte de una familia.
Un equipo judicial fue parte de ese momento tan especial y EL LIBERTADOR, habló con Fabiana Apezteguia, la autora del relato que conmovió a Ana (el nombre es ficticio para resguardar su identidad), a sus padres adoptivos y que traspasó los límites de la provincia ya que la noticia llegó a medios de alcance nacional.
“Cuando el Juez me pidió que escriba el cuento, al instante dije que sí. Tengo dos libros escritos para Hipólito, que son cuentos infantiles. La historia de Ana es muy linda, ella le pidió con todo su corazón a una estrella fugaz tener una familia y de ahí surgió la idea del cuento. Justo estamos en este tiempo en que todos tenemos ese espíritu navideño. Pero lo más lindo fue ver a Ana, como su cara iba cambiando y llenando de emoción a medida que el Juez le decía como viviría a partir de ahora, que iba a jugar con sus padres y que era la primera de muchas navidades juntos”, reveló la escritora, que además es licenciada en Comunicación Social, escritora y prensa del Superior Tribunal de Justicia.
Recordó Apezteguia que la idea – de comunicarle a la niña que iba a ser adoptada definitivamente por el matrimonio con el que convive hace seis meses, a través de un cuento-, surgió del Juez de Familia, Niñez y Adolescencia N° 5 de la ciudad de Corrientes, Edgardo Frutos.
“Me cuenta la historia de Ana, que me emocionó como a todos, hasta las lágrimas. A partir de allí escribo un cuento que después el Juez y todo su equipo, lo completa con detalles que yo desconocía de la vida de Ana, como por ejemplo que había vivido con una abuela, que falleció y se tuvo que ir a vivir con unos padrinos, relación que tampoco funcionó y finalmente terminó en un hogar de niños acá en Corrientes pero su mayor deseos siempre fue tener una familia. Ella disfrutaba estar con muchos chicos en el hogar pero siempre quiso tener un papá y una mamá que la contengan. Paralelamente a ello reciben en el juzgado a una pareja que quería adoptar una niña y se produjo el milagro de Navidad”, agregó.
“Pude participar de la audiencia en la que el Juez le leyó el cuento ‘Un milagro de Navidad para Ana’, y ver como ella, emocionada miraba a sus padres que estaban allí, a su lado, cuando le dijo esta será la primera de muchas navidades juntos, y se le llenaban los ojos de lágrimas y a todos los que estábamos presentes”, relató Apezteguia.
“Fue un momento magnífico, un milagro de Navidad para Ana y para todos los que pudimos vivir ese momento. Ojalá muchos niños tengan ese duende que fue Edgardo (Frutos), y a la Asesora de Menores, ‘Any’ Alvira que acompañó a la niña en todo el proceso e hizo un trabajo excepcional y les cumplan el deseo. Todos los niños tienen el derecho de tener una familia que los quiera y los contenga”.