Un hombre de 51 años de edad, que ingresó en la noche del viernes a las aguas del Paraná en la playa Arazaty de la Capital, fue encontrado con vida ayer en la mañana. Lo habían rescatado unos pescadores que lo hallaron flotando en las aguas y aferrado a una rama, según relató la Policía de Corrientes a EL LIBERTADOR.
Todo se supo ayer en la mañana, mientras la Policía y la Prefectura se movilizaron en las costas de la Capital por la búsqueda de este hombre que había sido arrastrado la noche anterior por la fuerte correntada. Lo buscaron intensamente con un equipo de buzos tácticos y una embarcación en la zona de playa Arazaty, donde lo habían visto por última vez.
Según el testimonio de una emprendedora que trabaja en la Costanera Sur frente al lugar, se trataría de alguien que esa noche se encontraba pescando en la zona. Consideró que «las autoridades deberían clausurar el ingreso nocturno a la playa por la crecida del río y el peligro que ello implica».
Por fortuna, mientras se esperaba lo peor, el hombre apareció con vida. Unos pescadores lo habían rescatado luego de verlo flotando aferrado a una rama. Según se dijo, estuvo toda la noche así y soportó la potencia de la corriente y también la baja temperatura, que ayer a las 7 era de apenas 11 grados.
De acuerdo a la Policía, posteriormente el sobreviviente concurrió a declarar a la Comisaría 2ª.
El hombre les habría relatado a los policías que «unos pescadores, lo ayudaron a venir hacia la orilla». No se sabe en detalle a qué hora y en qué circunstancias, lo encontraron vivo y lo acercaron a la orilla.
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