Un violento altercado vecinal en el Pasaje Juncal al 2200, en el barrio Bañado Norte de la ciudad de Corrientes, terminó con la detención de un joven que, además de ser investigado por agredir a un adulto mayor, tenía un pequeño «invernadero» de cannabis en su domicilio.
El escándalo se desató tras una brutal agresión. Un muchacho de 25 años, residente del pasaje, hirió a su vecino, un hombre de 80 años, efectuándole dos disparos con una pistola de aire comprimido. La víctima, que vive justo frente al departamento del agresor, radicó de inmediato la denuncia en la Comisaría Sexta.
La denuncia que destapó el narcomenudeo
La denuncia presentada por el adulto mayor movilizó rápidamente a los efectivos de dicha jurisdicción. Con la orden judicial en mano, y en la causa por supuestas lesiones leves y amenazas contra el octogenario, la fuerza policial procedió a allanar el domicilio del acusado.
El allanamiento, realizado el jueves último, buscaba el arma utilizada en la agresión. El resultado, sin embargo, sorprendió a los investigadores.


Hallaron y secuestraron la pistola de aire comprimido, marca FOX calibre.6, presuntamente utilizada para herir al anciano. Junto al arma, se incautaron 286 balines proyectiles, lo que sugiere un uso potencial y habitual del dispositivo.
La sorpresa del allanamiento llegó con el descubrimiento de cinco plantines de una sustancia vegetal que, por sus características, se presumía que era cannabis sativa.
Ante la evidencia de la presunta infracción a la Ley de Drogas, se convocó de inmediato a personal especializado de la Dirección General de Drogas Peligrosas y Crimen Organizado. Los peritos confirmaron la naturaleza de la sustancia y el inicio de una nueva línea de investigación por narcomenudeo.
El agresor, detenido
El joven de 25 años fue detenido en el lugar y quedó a disposición de la Justicia. Ahora deberá responder no solo por el ataque al hombre de 80 años, sino también por la tenencia y cultivo de estupefacientes descubierto durante el operativo.
Tanto el detenido como todos los elementos incautados están bajo custodia judicial mientras se prosiguen las diligencias para determinar si el agresor actuaba solo y cuál era el destino de la droga cultivada.

