Productores agropecuarios de distintos sectores expresaron a EL LIBERTADOR su preocupación ante el incremento de precios en el mercado cambiario del Dólar Mercado Electrónico de Pagos (MEP), el Dólar Contado con Liquidación (CLL) y el dólar Blue.
Señalan que los incrementos registrados en la primera quincena de este mes, que en algunos puntos del país se elevó el precio de la moneda norteamericana por arriba de los 540 pesos, y que hasta este lunes 17 en el segmento Blue se expresa relativamente estable en 522 pesos, lo que se traducirá en un incremento significativo en los costos de producción.
Los productores agrícolas advierten que a consecuencia de esta suba también se elevará el costo de las semillas, de los fertilizantes y de la maquinaria agrícola, insumos necesarios para llevar a cabo sus labores, que según señalan «se han vuelto cada vez más costosas debido a la depreciación del peso frente al dólar».
Productores dedicados a la ganadería indican que la situación se agrava aún más por la escasez de algunos insumos clave en el mercado nacional. Muchos de ellos, señalan que han experimentado dificultades para acceder a productos esenciales, como paquetes de nutrición, insumos veterinarios, elementos de identificación animal y forrajes enriquecidos, debido a la falta de oferta y a las restricciones impuestas a la logística.
ESCASEZ Y
ENCARECIMIENTO
Desde el sector yerbatero, que desde el sábado 1 evalúa escenarios alternativos a la pálida posibilidad de no contar con excepciones tributarias durante el próximo período, se advierte que la falta de insumos y el encarecimiento de los mismos impactará directamente en la producción.
Los yerbateros descartan la posibilidad de sufrir una disminución en la oferta de alimentos en el mercado interno y externo, razón por la cual, adelantan que, es muy probable que todo cambio en el mercado de monedas se traslade, oportunamente, al precio de la yerba en góndola.
Desde el sector ganadero y el arrocero, advierten que el aumento en los precios de los productos básicos, como la carne, sus derivados y los cereales, impactarán «de modo directo en el bolsillo de los consumidores», y aparejará «consecuencias negativas en las exportaciones agropecuarias, que representan una importante fuente de divisas».
MÁS DIFICULTADES
EN EL EXTERIOR
Los productores señalan que, si los costos en las cadenas productivas se vuelven «excesivamente altos» debido a la escalada del dólar, también podrían enfrentar dificultades para competir en el mercado internacional y cumplir con futuros compromisos de exportación.
Ante este panorama, insisten que el Gobierno debe tomar medidas que permitan garantizar el abastecimiento de insumos a precios accesibles y estables, además de exceptuar a todos los sectores del pago de impuestos y, paulatinamente, promover una reducción estructural de la carga tributaria. Asimismo, consideran fundamental promover políticas que fomenten la producción nacional y faciliten el acceso a financiamiento a tasa 0.
COMBATIR EL
DECLIVE Y EVITAR
EL ESTANCAMIENTO
Los productores remarcan que «la disparada del dólar» ha generado preocupación entre las todas las áreas debido a la posible escasez de insumos y al incremento de precios en el mercado interno, e insisten que es preciso «tomar medidas pronto» para mitigar estos efectos y promover un ambiente favorable para el desarrollo productivo, garantizar la seguridad alimentaria y la competitividad interna y en el ámbito internacional.
«El aumento en los tres segmentos del mercado más utilizados en el marco de la negociación con el Fondo Monetario Internacional y los organismos de crédito no es un dato menor, es una luz de alarma que dirige al estado de las reservas y al impacto que está generando en nuestra economía», señalan.
.