La seguridad vial es un desafío constante y las autoridades enfatizaron en que el conocimiento y la observancia de las reglas de tránsito son la primera línea de defensa para garantizar la integridad de los conductores y sus acompañantes.
El coordinador de Seguridad Vial del ministerio de Educación, Daniel Umbert se refirió a los siniestros viales y al comportamiento de los conductores en la ciudad, poniendo especial énfasis en los motociclistas.
En esos casos sostuvo que es obligatorio que en este tipo de vehículos circulen solo dos personas, ambas utilizando el casco reglamentario y debidamente abrochado. Sin embargo, surge una preocupación especial en torno a los menores de edad.
Sobre este tema, la normativa es clara y prohíbe prácticas riesgosas comúnmente observadas. Un menor solo puede ser transportado si cumple con requisitos específicos: «Si hay un menor lo puede hacer a partir de los cinco años de edad en la parte trasera, también importante, porque muchos padres llevan a sus chicos en la parte delantera y eso está prohibido, siempre y cuando el menor llegue a los estribos de la motocicleta, de lo contrario tampoco puede circular en este tipo de vehículos», sostuvo en diálogo a Radionord.
Expresó que a pesar de las sanciones existentes, se observa con frecuencia que los conductores realizan maniobras o acciones que comprometen seriamente su atención en la vía.
Los reglamentos prohíben expresamente estas conductas, buscando preservar la concentración del conductor: «A su vez también nosotros solemos ver en el paisaje de nuestra ciudad que muchos conductores de manera imprudente están manejando, en algunos casos están fumando, en otros por ejemplo vemos que realmente es la sin razón de ir tomando un mate, por ejemplo, con otra persona, pero eso también ocurre. Es también importante que el ciudadano lo pueda saber que eso también está prohibido y por ende va a haber una sanción para aquellas personas que conduzcan en este estado», indicó.
LUCES Y ESPEJOS
La seguridad no solo depende de la conducta, sino también de la condición técnica del vehículo. Las luces son un elemento no negociable, siendo un «código internacional establecido no solamente en nuestro país sino en el mundo mundial, que la luz delantera es de color blanco y la luz trasera de color rojo».
Las modificaciones estéticas, conocidas popularmente como tuning, pueden acarrear graves consecuencias legales si alteran la funcionalidad lumínica. Si un vehículo no cumple con el código de color requerido, la sanción es inmediata y severa. Se advierte que si «usted utiliza una luz violeta, una luz naranja en la parte delantera, si hay un contralor vehicular, el agente puede proceder al retiro de la vía pública del vehículo porque dice que si usted no soluciona el problema técnico en el lugar se retira el vehículo», advirtió Umbert.
De igual manera, la presencia de los espejos retrovisores es fundamental para la seguridad y es un requisito ineludible en cualquier control. El no cumplimiento de esta norma es una causa directa de inmovilización del rodado. Respecto a este punto, la autoridad señala que es un «tema que muchas veces no se tiene en cuenta y que a la hora de un control vehicular, estas son condiciones sin escuadrón para que no se proceda, vuelvo a reiterar, el retiro de la vía pública de este tipo de vehículos (por falta de los dos espejos)», reveló.
El mensaje de las normas de tránsito es claro: la prevención de siniestros viales en motocicletas está íntimamente ligada al cumplimiento cabal de los requisitos técnicos y de comportamiento, asegurando que la circulación se realice en condiciones óptimas y legales.

