Con el frente abierto por el flamante jefe de la Anses, el conocido escribano y empresario Diego Figueredo, que ya se ha anotado para la sucesión del Intendente, lo cierto es que Ascua enfrenta -por si fuera poco- una rebelión «en su propia granja» debido a su irrefrenable tendencia al nepotismo, puesta de manifiesto por haber distribuido, entre sus hermanos, el poder municipal.
La postulación de Celeste Ascua a senadora pareció «la gota que rebalsó el vaso». Sorprendió en lo provincial y originó una hecatombe en Paso de los Libres. El sonoro portazo de su primo Sebastián Pardo, ex secretario de Seguridad, quien se fue «cantándole las cuarenta» para hacer dupla con Faraldo, que también aspira a la intendencia.
Lo cierto es que, por la coronación de Celeste, hay quejas, algunas más solapadas que otras, desde el desplazado diputado Miguel Arias, hasta el secretario de Gobierno, «Tata» Sigilio. Mientras, crece la idea de que «Tincho» apostará a su hermana menor Ana, quien es contadora del Municipio.
El crecimiento de la alternativa opositora, dentro del propio peronismo se manifestó -de manera exponencial- al blanquear Figueredo por los medios la decisión de competir en las internas del peronismo, para quedarse con la candidatura mayor de 2025. Parte de la llamada «mesa provincial de la discordia», nunca blanqueada, que indujo a errores de fondo a la Intervención y luego terminó «borrándose» a la hora de las responsabilidades.
Meses antes, había intentado «puentear» a Zabaleta con una convocatoria en Paso de los Libres, en que el Interventor «brilló» por su ausencia, luego de dejar en claro que no la había autorizado. Ya desde entonces, aislado del resto de los jefes comunales, arrancó con una arremetida, a espaldas del resto del justicialismo, apoyado en Canteros, en detrimento de las estrategias partidarias que apuntaban a reivindicar la identidad perdida. Antes del acto de este viernes, buscó llevar agua para su molino con un fallido mitin en su comarca, que dejó en evidencia que «ya no es profeta de en su tierra». Es más, para público fueron convocados empleados contratados del Municipio, cuyos contratos vencen cada 30 días. Desde allí, anunció: «Vamos a estar lanzando nuestro espacio político en la Capital correntina», algo que fue tomado en sorna.
«En Paso de los Libres, comienza la recuperación de los derechos de los correntinos». De esta manera arrancó un video en las redes sociales el intendente, Martín «Tincho» Ascua. Lo hizo un día antes de la presentación de candidatos que se hizo en la Capital este viernes.
En la publicación, se encargó de asumir la representatividad opositora provincial, sin haber logrado consensos internos, sólo teniendo en su haber la ruptura de las filas justicialistas a un mes de la primera contienda electoral del año.
«Desde acá comienza la construcción de un nuevo camino, de una nueva alternativa de poder. Vamos a estar lanzando nuestro espacio político en la Capital correntina», manifestó. En cada una de sus afirmaciones, el Jefe comunal dejó entrever la intención de capitalizar la avanzada del Frente de Todos, añadiendo a cada frase la pertenencia a una localidad, sin ampliar el discurso a toda la provincia. Un mensaje implícito, quizás, para la dirigencia que no acompaña sus formas ni sus objetivos.
«Los esperamos a todos. Viva Corrientes, viva el Frente de Todos», cerró el video publicado en la noche del jueves 27.
Lo que está claro es que en 2024 y 2025, Paso de los Libres será un territorio donde se librará una encarnizada lucha que alcanzará ribetes provinciales, con un Intendente al que, descartado Miguel Arias, le costará entronizar un sucesor. Aunque al menos, por ahora, la Comuna seguiría dentro del mismo signo partidario. En este sentido, la convocatoria de Sebastián Pardo, que es otro de los que emigra del sector de «Tincho».
EMPECINADO
Para muestra «basta un botón», pero para Ascua pareciera sobrarle un costurero. Es que varias fueron las situaciones en las que quedó claro que sus estrategias y pretensiones fueron demasiado individualistas y sin apego al ideario justicialista.
Ya ocurrió años atrás, cuando se mostraba como correveidile de Gustavo Valdés (durante su primer mandato). De allí surgió una cantidad considerable de pruebas que lo ubicaron como alfil de los radicales, teniendo entre sus «laureles» la lista de 2019, apoyada por el Gobernador, que perjudicó sobremanera al PJ. Fue una intentona en la que pretendió apoyarse en la extinta «liga de intendentes».
Este año, se expuso con una convocatoria en Paso de los Libres que sólo recogió cuestionamientos. Fue a mediados de febrero, cuando encabezó una reunión que sólo tuvo relevancia por los «faltazos».
«Hubo muchos compañeros que no pudieron estar, lo aclaro porque lejos de querer excluir; al contrario, soy una persona que quiere ampliar la mesa de trabajo», explicó por entonces.
Después, al no obtener acompañamientos orgánicos ni de la militancia, ni mucho menos de los referentes justicialistas decidió jugar en tándem con Gustavo Canteros.
Lo ocurrido este viernes fue una evidencia contundente de lo errado del camino elegido para ir a las urnas.
Fue un acto de presentación de candidatos en la calle, frente al edificio de la sede del Partido Justicialista en el cual no participaron los justicialistas, valga la redundancia. Las presencias tradujeron lo que fue la confección de listas. Mayoría de partidos aliados, con el PJ en un rol notoriamente secundario. Sin la presencia de la única autoridad orgánica vigente, como la del Interventor del justicialismo local, hoy claramente desilusionado.
Tampoco estuvieron los legisladores nacionales ni los intendentes. Apenas algunos legisladores provinciales y ningún dirigente de relevancia de Capital ni del Interior.
Un evento que expuso el «vacío opositor». Un Frente de Todos sin capitán ni timonel, sin legitimidad política, sin acompañamiento de las bases, sólo apoyado por organizaciones barriales a cuyos integrantes toman lista obligatoria en cada acto. La falta de organización, de conducción, de discurso genera dudas en torno a la movilización, distribución de boletas, fiscalización y uno de los temas ríspidos como es la administración de los recursos que prometieron y hasta ahora no se hacen ver, según la preocupada dirigencia del Interior.
.