Corrientes elige hoy 15 diputados, 5 senadores, concejales en 64 comunas y algunos convencionales constituyentes municipales (ver página 4). Sin embargo, el peso específico que tendrá este turno electoral -sin ser para el Ejecutivo- será importante a escala nacional.
La «grieta» del país verá con especial atención lo que suceda en un territorio que siempre ofrece capítulos cuanto menos pintorescos en materia política. Lo mismo pasará con Tucumán, Mendoza y San Luis.
Pero en Corrientes, quedó en evidencia el interés de los líderes de Juntos por el Cambio de llevar agua hacia su propio molino, en medio de la interna rumbo a las presidenciales que tiene a Rodríguez Larreta y a Bullrich en una puja de tintes bélicos.
Otra cosa que se observó de forma fehaciente fue el desinterés del Gobierno central de posicionarse territorialmente en la provincia, un bastión siempre esquivo, a pesar de saber que una derrota categórica colaborará con la incertidumbre latente en el Frente de Todos nacional, donde no se ponen de acuerdo en cómo encarar las estrategias hacia octubre. Como prueba más próxima quedó la Convención del Frente Renovador de ayer, donde Massa amenazó con pugnar la principal candidatura a los kirchneristas (ver Contratapa).
Lo cierto es que hoy, ECO + Vamos Corrientes buscará aplicar la técnica del knockout, o sea, terminar la contienda sin atenuantes, con ganas de posicionar a Gustavo Valdés en el escenario nacional, donde pretende hacer pie -primero- en el Comité de la UCR, para luego pensar en 2027, que lo tendrá ya sin el cargo de Gobernador y listo -tal vez- para probar suerte en Buenos Aires.
Intertanto, la figura (en caso de una victoria rutilante) de este domingo será Colombi. El mercedeño establecerá con su banca una especie de «cabecera de playa» implícita, que le dará plafón para ensayar una nueva avanzada rumbo al Sillón de Ferré, a sabiendas de que su amigo Valdés buscará ubicar a alguien de su riñón para sucederlo en 2025 (ver nota de arriba).
Lo cierto será que Ricardo podrá jugar fuerte, como le gusta, teniendo la tranquilidad de que le quedará más tiempo en la Cámara alta, en caso de no alcanzar el objetivo principal. Mientras, el ituzaingueño planificará una avanzada de varios niveles, que incluirá a Corrientes como a Nación, en el lugar que pueda negociar dentro de Juntos por el Cambio, o como fuera que se llame en unos años la coalición liderada por el PRO y la UCR.
DISTRITAL
La estrategia oficialista apunta a fortalecer la tracción en los principales distritos electorales de la Provincia. Capital, Goya y Santo Tomé buscarán ser los núcleos de recolección de votos que aseguren una performance digna de exponer ante el país. Colaborará lo que suceda también en Curuzú, otro territorio de peso cuantitativo. Y se esperará por lo que pueda suceder en Paso de los Libres, Esquina y Virasoro, conscientes de que allí, la oposición podría no pasar sobresaltos. Aunque, en caso de ocurrir, sería un agregado para agrandar los números que pudieran obtener.
¿Y LA OPOSICIÓN?
Desde el principio se notó que el camino iba a ser desorganizado. Más allá de lo voluntariosa dirigencia del justicialismo, hubo varios factores que desorientaron el trayecto hacia el 11-J. En principio, el hecho de estar bajo una Intervención dificultó las conversaciones y la consecuente obtención de consensos. Después, el omnipresente «dedo de Buenos Aires» hizo lo suyo, lo de siempre, pergeñando una lista que sólo agigantó la división interna, a pesar de las manifestaciones de buena voluntad de gran parte de la militancia.
La avasallante presencia de La Cámpora, con los permisos dados al massismo y la inclusión de Gustavo Canteros como único exponente sciolista (el sector más allegado al albertismo) no hicieron más que confundir no sólo al electorado, también a los afiliados, hombres y mujeres del Interior que son pata fundamental de la estructura en cada elección.
Resquemores que se fueron agrandando con el paso de los días, hasta llegar al cierre de campaña, con la sugestiva ausencia del primer candidato a Diputado y la nula apoyatura de Nación, que siquiera se molestó en enviar a algún funcionario de peso, por lo menos alguien devenido del Instituto Patria que llegara para levantar las manos a los que irán hoy al cuarto oscuro en busca del apoyo ciudadano.
Un sinfín de yerros no forzados que -tal vez- se traduzca hoy en otra derrota histórica.
Después de las 18 se sabrá. Hasta entonces, todo será como hasta anoche, un mar de incertidumbre.
Por Jaime Meza.
Jefe de redacción.
.