La ciudad de Corrientes se prepara para recibir la Fiesta Grande 4: El copetín de Colinental. El evento tendrá lugar este sábado, con apertura de puerta desde las 22, en el salón del club de Regatas.

El programa de la noche busca recapturar el espíritu de décadas pasadas y asegurar la diversión continua. Los asistentes podrán disfrutar de una variada selección musical que abarca música de los 80’s y 90’s, así como un espacio dedicado a los lentos.
Entre las atracciones principales, se destaca la presencia de bandas en vivo, además de un segmento de Carnaval y la entrega de regalos durante toda la noche.
Para quienes deseen asegurar su participación en esta fiesta, las entradas están disponibles para su adquisición a través de la plataforma en línea www.clubtix.ar.
LA MÍSTICA DEL «ASALTO COPETÍN»
Lo que comenzó como una «juntadita» entre anunciantes, clientes y amigos del programa radial Colinental se ha transformado en un fenómeno que busca «revivir experiencias que fueron inolvidables», contó a EL LIBERTADOR, Daniel Collinet, integrante de la organización del evento.

Según relató, la primera edición nació en diciembre del año pasado en el Club Huracán, y la repetición constante del evento (junio, octubre y ahora en noviembre) demuestra su crecimiento. La idea de la fiesta surgió desde el programa de radio y ha crecido tanto que incluso ya cuenta con merchandising.

Por otra parte, sostuvo que la fiesta se sostiene gracias a que los anunciantes «aportan lo que esté a su alcance», ya sea para costear al DJ o a través de productos. Gracias al aporte de los colaboradores, la noche incluye la entrega de regalos y sorteos durante toda la duración de la fiesta. En ocasiones, los sorteos han incluido premios mayores como viajes o entradas para recitales fuera de Corrientes. Además, durante la noche distribuyen golosinas que remiten a las mesas de dulces de los cumpleaños de 15.

Collinet resaltó que la fiesta se caracteriza por ser «muy económica» y «accesible». A su vez, la fiesta cuenta con un patio gastronómico con locales de la zona y una barra que ofrece todo «muy accesible», reviviendo así la esencia de compartir del copetín.

