En la Iglesia, juntos, sinodalmente como rezó el lema de la 43ª Peregrinación Juvenil del NEA, concluyó ayer la mega manifestación de unos 300.000 jóvenes con la misa central, quienes en su ya tradicional Manifiesto, expresaron el momento difícil que atraviesa el país y reclamaron un acompañamiento fuerte de la comunidad de creyentes, mientras el arzobispo de Corrientes, Andrés Stanovnik, que presidió esa celebración, tuvo contundentes palabras contra la división que corroe a la Argentina y reiteró su condena a los que la promueven, porque son los grandes beneficiarios, de una ley que considera a la prostitución como un trabajo.
Amerita mencionar aquí, precisamente, las acciones intensas que realiza la Delegación NEA del Comité contra la Trata y Explotación de Personas de la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación, en busca de prevenir y liberar de los diversos tipos de esclavitud moderna.
En otro aspecto, cabe destacar que antes del inicio de esa misa en la que participaron autoridades provinciales y municipales y legisladores, se dio lectura a la decisión de la Legislatura de la Provincia de Corrientes por la que declaró de su «Interés» esta edición de la iniciativa de miles de muchachos y chicas sin diferencias, que se realizó por primera vez en 1979.
UN MENSAJE
PROFÉTICO
«Qué hermoso es todo esto ¡Junto a María nos volvemos a encontrar como Iglesia sinodal!», exclamó monseñor Stanovnik al momento mismo de comenzar la misa y de inmediato con énfasis manifestó: «¡Qué bien nos hace caminar juntos y cuánto daño nos hacemos unos a otros cuando caminamos cada uno por su lado! Nos pasa a los argentinos y a las argentinas. Dios quiera que este gesto (el de peregrinar juntos) nos ayude como súplica para que encontremos el camino de peregrinos hacia la Casa del Padre y renunciemos a los intereses particulares», tras lo cual recordó, como lo hizo el año pasado en la manifestación mayoritariamente virtual, que este año la peregrinación coincidió con la Jornada de Oración y Reflexión contra la Trata de Personas. Y denunció: «Pero lamentablemente en nuestra Patria, en otro modo de caminar unos contra otros, se desarrolla una campaña para que la prostitución se considere como un trabajo, impulsada por quienes explotan la prostitución».
Puntualizó que el Papa «nos recuerda que la Trata de Personas constituye una violación injustificable de la libertad y la dignidad de las víctimas, dimensiones constitutivas del ser humano ¡deseado y creado por Dios! Por lo que debe considerarse un Crimen de Lesa Humanidad», subrayó pausadamente el Pastor mayor de la Iglesia en la provincia eclesiástica, que conforman las provincias de Corrientes y Misiones.
«Invoquemos intensamente la gracia de caminar juntos, en paz y fraternidad, respetándonos entre todos», pidió.
TRES POBREZAS
Si bien, desde el sábado a la noche y durante la madrugada de ayer los obispos de las diócesis, que integran la región, celebraron misas para los peregrinos que se adelantaron en la llegada por haber partido antes, la eucaristía final la concelebraron entre todos y la presidió el arzobispo de la Arquidiócesis de Corrientes como anfitrión, como se indicó, en tanto que la homilía la predicó el obispo de la Diócesis chaqueña de Sáenz Peña, Hugo Barbaro.
Desplegó su mensaje en el eje de la pobreza, en tres aspectos y en correlato con las afirmaciones del Papa Francisco, que se refieren a la pobreza material, sobre la que pidió a Dios para que «se acaben tantas angustias económicas que quitan la paz en un hogar»; la pobreza moral, que «considera normales los comportamientos malos, que corrompen, que son pecados: mentir, calumniar, una sexualidad egoísta y desordenada, y tantas otras miserias morales». Y, una tercera pobreza, la espiritual, que corroe la vida de «quien se aleja de Dios y no siente necesidad de su amor de Padre. Es pobre, muy pobre. Se olvida de Cristo está siempre alargando su mano para ayudarnos».
LA HOMILÍA
«Muy queridos jóvenes. Con sacrificio han llegado a este Santuario; bien cansados pero llenos de alegría asisten ahora a esta Santa Misa. ¿Quién los empujó a venir? Evidentemente fue Nuestro Señor Jesucristo; quiere que le muestren a la Santísima Virgen María, una vez más, todo el amor que le tienen. Muchos ofrecieron el esfuerzo de la larga caminata. Emociona ver a miles avanzando por la ruta, llegar agotados al Santuario, rengueando, y arrodillarse, conmovidos, delante de la imagen de nuestra Tierna Madre de Itatí. ¡Cómo no va a recompensar la Virgen tanto cariño de todos!».
«¿Por qué vinieron? Cada uno sintió que Cristo le hablaba al corazón: Acércate a mi Madre que es también tú Madre; regálale el esfuerzo de ir a Itatí, de caminar, Ella se ocupa todo el tiempo de vos. Ella conoce tus sufrimientos, tus inseguridades, tus miedos, abandónate en sus brazos. Confiá en María, te quiere como sos; te ayuda a crecer en todo lo bueno, a superar tantos desafíos que no faltan en la vida, y quiere que la tuya -tu vida- sea una aventura por todo lo alto».
«Las madres se ponen tristes cuando ven a un hijo ir por mal camino, hacen lo imposible para encaminarlos bien. ¿Hará menos la Virgen para que vayamos por el mejor de los caminos en esta vida y alcancemos el Cielo? El Papa Francisco habló hace unos años de distintos riesgos que corremos. Habló de la pobreza material, que puede afectar mucho. Pedimos en esta Santa Misa, por intercesión de la Virgen, que no falte el trabajo, ni lo que necesitamos para llevar una vida digna, para sostener una familia; que se acaben tantas angustias económicas que quitan la paz en un hogar».
«Pero el Papa también mencionó otras formas de pobreza, otros riesgos graves a tener en cuenta. Uno es el de la pobreza moral. Consiste en convertirse en esclavos de vicios como el alcohol, la droga, la pornografía, la violencia. A veces se escucha decir: este muchacho, esta chica, no tiene moral, va por mal camino. ¿Qué le pasa? Considera normales los comportamientos malos, que corrompen, que son pecados: mentir, calumniar, una sexualidad egoísta y desordenada, y tantas otras miserias morales».
TE QUIERE FELIZ
Y TU COMPROMISO
«La Virgen no es indiferente ante un hijo que se deja corromper. Escuchá su dulce voz, materna; te quiere feliz, capaz de amar, transmisor de la riqueza de tu vida sana, buena».
«También se refirió el Papa a otro riesgo, el de la pobreza espiritual. ¿Quién la sufre? Quien se aleja de Dios y no siente necesidad de su amor de Padre. Es pobre, muy pobre; se olvida de Cristo que está siempre alargando su mano para ayudarnos, para perdonar los pecados, para transformar nuestra vida, hacerla muy buena».
«La Virgen nos quiere muy ricos a los ojos de Dios. Esa riqueza nos la regala Dios, pero cuenta con que estemos deseosos de tenerla, y que lo demostremos con el esfuerzo que podamos poner para acercarnos más a Dios, y para alejarnos de lo que no es de Dios. Les costó esta peregrinación, pero caminaron con entusiasmo, con esfuerzo, deseosos de alcanzar la meta de llegar hasta la Virgen. Igual sucede en la Vida, tenemos que desear la meta alta que Dios quiere para cada uno, y caminar con María. Confiá en María, está a tu lado; no te desanimes por tus fragilidades, por tus debilidades y caídas. Ella te sostiene. Ella te levanta como las madres alzan a un nenito que se cayó porque está aprendiendo a caminar; Ella te lleva a Jesús que tiene los remedios y el alimento que necesitás, no te sientas nunca derrotado sino muy amado por Dios».
«Queridos jóvenes:
Dios cuenta con cada uno de ustedes, quiere que contagien a otros la riqueza espiritual del amor a Dios y a la Virgen que llevan en su corazón, tantos valores buenos que lucen en sus vidas. Cuenta con ustedes para que metan todo ese bien en las familias, para que sean felices y se superen tantos sufrimientos, tantas crisis».
La imagen de la Virgen, hacia Resistencia
ITATÍ. Más de 300 mil peregrinos y en casi su totalidad jóvenes, junto a adultos que los acompañaron como apoyo, llegaron a la Basílica de Itatí entre este sábado 17 y domingo 18, luego de dos años de suspensión de la Peregrinación Juvenil del NEA, a cuyo término leyeron el Manifiesto, al que EL LIBERTADOR publicará en la edición de mañana, porque no terminó todo: recién comienza el año del compromiso cotidiano y de esfuerzos renovados.
También, se hizo el traspaso de la imagen peregrina de la Virgen de Itatí, que estuvo en la diócesis de Oberá, Misiones, a los jóvenes de la Arquidiócesis de Resistencia, en la que visitará a las comunidades eclesiales hasta la Peregrinación del próximo año.
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