Así lo estimó la Cámara de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (Cadam), que, al igual que los supermercados, lanzó una ofensiva pública contra la creciente presión impositiva impuesta por diversos municipios.
“Solicitamos a los municipios que reviertan los aumentos en las tasas, que además fueron implementados a mitad del ejercicio fiscal, lo cual complica la planificación financiera de las empresas, que ya habían calculado estos costos”, afirmaron desde Cadam.
Agregaron además: “Esperamos que, con la implementación del nuevo Régimen de Transparencia Fiscal al Consumidor, tanto municipios como provincias se adhieran y se detalle en cada compra el desglose de la carga impositiva, para que los consumidores comprendan por qué suben los precios”.
La semana pasada, la entidad advirtió que las recientes subas en las tasas municipales generarán un aumento en los precios. También señalaron la existencia de «tasas injustificadas», como la obligación de plantar un árbol por ordenanza, seguido del cobro de una «contribución forestal».
Otro ejemplo es el llamado «impuesto al Calco», que se aplica por exhibir en las vidrieras los medios de pago. Además, mencionaron la tasa de publicidad y propaganda interior, que grava la exhibición de elementos publicitarios dentro de los locales, como exhibidores o heladeras que contienen bebidas de determinadas marcas.
“Estos son solo algunas de las formas de recaudación municipal que asfixian a las pymes”, expresaron desde Cadam, añadiendo: “Nuestro margen de ganancia se reduce a apenas un 3% o 5%”.
El pedido de una reducción de la carga impositiva se da en un contexto de fuerte caída en el consumo, pese a la desaceleración de los precios. De hecho, según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), las ventas de alimentos y bebidas cayeron un 11,8% interanual en agosto, acumulando un descenso del 20,5% en los primeros ocho meses de 2024. En la comparación mensual, retrocedieron un 1,8%.
Asimismo, el último informe del Indec reporta que las ventas mayoristas de productos de primera necesidad, como alimentos, bebidas, artículos de limpieza y perfumería, cayeron un 9,77% en junio en comparación con el mismo mes del año anterior.