Regatas, en cuartos de final, San Martín y Comunicaciones, instalados en octavos, afinan la puntería en vista a la pos temporada; aunque el rojinegro todavía debe completar su fixture en la fase regular. Un análisis sobre las posibilidades de los distintos planteles que serán protagonistas.
Los playoffs de la Liga Nacional están golpeando la puerta de la esquina y el 5 de abril empezará la instancia más decisiva de la competencia en la que los errores se pagan caro y los aciertos se pueden traducir en un campeonato.
Quimsa es el líder, San Lorenzo y Regatas Corrientes, serán sus escoltas, pero el resto de los equipos también poseen sus credenciales y apuestan a mantener sus ilusiones en instancias cruciales de playoffs.
TRES ILUSIONES DE LA PROVINCIA
Regatas: la presión defensiva. Preferentemente aplicada en los inicios de los cuartos, la presión que propone Regatas a través de la dirección de Lucas Victoriano es ya una marca registrada del equipo y que no se ve con frecuencia en la mayoría de los otros equipos. Esto le permite ser el tercer conjunto que más robos produce (7,8 de promedio) y el tercero que menos puntos recibe con apenas 73,6, siempre con la aclaración de que posee un ritmo no tan alto (73,9) que fomenta esa cantidad de tantos permitidos.
San Martín: la defensa. Si bien es cierto que su ritmo es uno de los más bajos de la competencia (el cuarto más lento con 73,6), la falange de los correntinos atrás se edificó como ninguna y por la disciplina de sus dirigidos, la forma de marcar el pick and roll y la intensidad, a todos se les hace muy difícil vulnerarla. Por ejemplo, son por escándalo el que menos puntos recibe de la competencia en total (2.630) y de promedio (71,1), como así también son el tercero que mejor protege su pintura (tercero en rebotes defensivos con 30,1) y el cuarto que más bajo rating posee (98,4).
Comunicaciones: la carga al rebote ofensivo. Los dirigidos por Ariel Rearte poseen uno de los conjuntos más dúctiles atrás de la Liga Nacional gracias al poder de Fierro, Miguel Gerlero, Lucas Arn, Robert Battle y Williams, entre otros. Una de las premisas es cargar al rebote ofensivo y allí los mercedeños lideran a la Liga Nacional, siendo punteros en el apartado con 11,9 de promedio. Además, nadie más que ellos capturó al menos, 400 atrapes adelante (454 en total) hasta el momento, y Mariano y Austin son Top-15 en cuanto a la tabla individual con 3,1 y 2,2 por encuentro respectivamente.
EL RESTO
Quimsa: la contundencia. El líder de la competencia. Por algo lo es. Líder en eficiencia (92,6), puntos anotados (83,2), tapas (4,3), robos (8,3), porcentaje de triples (35,7 por ciento), rating ofensivo (110,8), tiro verdadero (56,9 por ciento) y tiro de campo efectivo (53,6 por ciento). ¿Nada mal no? Además, es el quinto mejor en rating defensivo (98,8), el segundo en puntos desde el banco (32,4) y en triples convertidos (10,2). Absoluto dominio.
San Lorenzo: la segunda unidad. Cuando Silvio Santander llegó a la institución comentó en una entrevista que deseaba alargar lo más posible el equipo y, a semanas de empezar la postemporada, se puede afirmar que lo consiguió. Las estadísticas lo avalan y es la escuadra que más puntos anota en promedio desde el banco con 33,5. Tal es el poderío de la segunda unidad que muchos de los suplentes sería definitivamente titulares en otros clubes.
Hispano: Kelsey Barlow. Hablar de Hispano es hablar de Kelsey Barlow. El foráneo que se despachó con 48 puntos ante Libertad para entregarles a los suyos en bandeja de plata la clasificación a los playoffs viene siendo uno de los animadores de la competencia desde que llegó al país y en esta edición no fue la excepción. Segundo máximo anotador del torneo con 18,3 puntos, alcanzó una versión dominante de la mano de Picatto, quien le da rienda suelta a su creatividad como portador de balón, rol en el que se siente más suelto.
Platense: la vertiginosidad. El Calamar apuesta al juego rápido y en ese aspecto es siempre fascinante verlos, sobre todo cuando los tiros entran y los atacantes del plantel se sienten cómodos e inspirados. Solo Ferro anota más puntos en total que Platense (468 para los de Vázquez y 508 para los verdes), a la vez que en promedio es el tercer conjunto de la 2020/21 que más convierte en ese aspecto (12,4) y posee el cuarto ritmo más alto con 75,8.
Olímpico: puede darle un dolor de cabeza a cualquiera. Si está en su día, Olímpico puede ser un sufrimiento para quien esté enfrente. Los mejores ejemplos son las victorias ante posibles candidatos como Gimnasia (dos veces) y Obras, como así también las rachas de triunfos (logró una de cuatro ganados con la victoria frente a Peñarol el 18 de este mes.
Instituto: la selección de tiro. Si en algo se caracteriza Instituto es en encontrar al compañero de óptima forma, siempre apostando por el pase extra. Esto le permite ser el tercero mejor en tiro de campo efectivo con 52,3 por ciento y en porcentaje de triples con 34,1 por ciento. También es Top-5 en eficiencia (quinto puesto con 85,9), algo que refleja su labor a la hora de tomar decisiones, y puntos convertidos (81,8).
Obras Basket: la juventud. Ver a un equipo jóven divertirse de la forma que lo hace Obras es atípico y solo Sebastián Chaine tiene más de 30 años en el plantel (34), lo que refleja la apuesta del rockero de la mano de Murphy en el banco de suplentes y con la pizarra, y aprovechando la dupla conformada por Fernando Zurbriggen y Joaquín Rodríguez para causar estragos (15,2 y 10,6 puntos de promedio respectivamente.
Gimnasia: el ataque balanceado. Si algo posee Gimnasia es que jamás se sabe de dónde saldrá el veneno. Sebastián Vega es el goleador del equipo con 12,5 puntos, pero, además, otros dos jugadores anotan más de diez tantos por juego, dos más de nueve y tres más de siete. Además, esta multitud de poder colectivo también se traduce en su peligrosa segunda unidad, que es la cuarta que más convierte en toda la liga con 30,2 tantos por encuentro.
Boca: pasarse el balón. El elenco de Gonzalo García sabe cómo pasarse el balón, lisa y llanamente. Algo que siempre caracterizó a los equipos de este entrenador, con veteranos confiables que saben encontrarle la vuelta al ataque y siempre buscan lo mejor para sus compañeros. En promedio, son el segundo conjunto que más asistencias consigue con 17,4, a la vez que también es el segundo de ese apartado en totales (662) y tercero en porcentaje (59,5 por ciento).