Efectivos de la Gendarmería interceptaron un transporte de pasajeros de larga distancia en el que viajaba un menor de edad con cocaína. El operativo estuvo encabezado por integrantes del Escuadrón 57, quienes desplegaban tareas preventivas en jurisdicción de Alvear y, en ese sentido, detuvieron la marcha de un micro que circulaba con destino a La Plata, en Buenos Aires.
Con el objetivo de realizar la inspección física y de documentos, los gendarmes procedieron al registro del vehículo. Fue así que observaron que un pasajero se encontraba muy abrigado, aún con la calefacción del rodado encendida, situación que despertó la sospecha de los uniformados.
Ante esa circunstancia, procedieron a identificar al joven y constataron que se trataba de un adolescente, de 16 años, quien inició su viaje en Misiones y debía bajarse en la provincia de Entre Ríos. Con esos datos recabados, cachearon al menor y detectaron un bulto sobre su espalda que no coincidía con la fisonomía de su cuerpo.
Así, el chico se quitó el abrigo y los federales visualizaron un paquete envuelto con una faja, adosado al tronco del muchacho. Una vez reunido a varios testigos, los funcionarios extrajeron el bulto y, con la participación del personal de Criminalística y Estudios Forenses de la Unidad, se realizó la prueba orientativa de campo, cuyo resultado arrojó positivo para clorhidrato de cocaína, con un peso de un kilo y 22 gramos.
DEVUELTO
A SUS PADRES
Los agentes de la fuerza nacional dieron inmediata intervención al Juzgado y la Fiscalía Federal de Paso de los Libres, desde donde se orientó el secuestro del estupefaciente y demás elementos de interés para la causa. También, el Ministerio Pupilar de Santo Tomé dispuso que el involucrado sea entregado a sus padres una vez arribado al lugar donde se cometió el ilícito y con las actas pertinentes.
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