Criadores de 15 países visitaron la Argentina para el Congreso Mundial Brangus, y pudieron ver rodeos en producción y en distintos ambientes, además de reproductores de genética superior en las pistas de la Sociedad Rural de Corrientes. Gran reconocimiento al trabajo de los productores argentinos, de quienes destacaron su permanente inversión, la búsqueda del biotipo para cada campo y la pasión por el trabajo.
La presencia de decenas de criadores extranjeros en el Congreso 2023, organizado por la Asociación Argentina de Brangus y Expoagro, permitió mostrar al mundo el gran presente de la raza en el país y también para que las delegaciones visitantes conozcan los pormenores de producir en la Argentina. El denominador común fueron los elogios a la calidad de los rodeos que se vieron en los campos y en las pistas de jura, pero también al trabajo y la pasión que le ponen los ganaderos argentinos, a pesar de las adversidades del clima y del contexto económico.
El Mundial Brangus congregó a criadores que llegaron desde distintas partes del mundo para vivir «La Experiencia argentina»: una recorrida por seis cabañas en Corrientes, Formosa, Chaco y Santa Fe, donde se mostraron lotes de Brangus en producción y en distintos ambientes. Y todo finalizó en la Sociedad Rural de Corrientes, con tres jornadas a pura genética, con la Exposición Nacional del Ternero y la Gran Nacional de la raza, como al igual que otros medios, EL LIBERTADOR publicó en sus páginas las jornadas de la semana pasada.
Desde lugares lejanos, como Tailandia, Australia o Sudáfrica, otros de Estados Unidos y toda América Latina y el Mercosur, acompañaron a sus colegas argentinos en este gran evento ganadero internacional.
ANTE LOS OJOS
DEL MUNDO
Transcurridas las recorridas por los campos y las exposiciones en Corrientes, el criador tailandés Sanya Suphappornchai, de la Thai Brangus Association, se mostró muy interesado en todo lo que mostraron las cabañas argentinas y en la genética Brangus, quien manifestó que «somos una Asociación joven, estamos comenzando en comparación con la Argentina». Explicó que si bien en su país tienen un clima muy cálido y húmedo como en algunas regiones argentinas, las explotaciones tailandesas son más pequeñas, en su mayoría a escala familiar. «Consideramos que el Brangus puede adaptarse muy bien a nuestros campos», señaló.
Por su parte, el vicepresidente ejecutivo de la International Brangus Breeders Association, de Estados Unidos, Darrell Wilkes, comentó que «me voy muy impresionado de la calidad de los animales. Vimos una raza muy fuerte, con alta calidad en carne y productores de alta tecnología».
En cuanto a las diferencias con el Brangus norteamericano, el directivo de la entidad con sede en Texas sostuvo que «hay algunas diferencias, pero no tantas. Nosotros compramos semen en la Argentina y estamos muy contentos, y los criadores argentinos compran semen en Estados Unidos y están contentos; no veo muchas diferencias entre los biotipos, y creo que el objetivo es el mismo: producir carne de calidad».
Otro participante fue Martin Lill, criador que llegó desde Australia, quien consideró que «lo más increíble del Brangus argentino es su evolución en los últimos 5 o 10 años; vemos un animal con mucha carne y mucho músculo» y puntualizó que los animales de ambos países son similares; «son animales muy productivos y que se adaptan muy bien; nosotros tenemos un clima muy caluroso y seco y aquí tienen un clima mucho más húmedo, y la raza se adapta a cualquiera de los dos ambientes».
Mario Ordoñez, de la Asociación Brangus de Ecuador, compartió su satisfacción, al señalar que «estamos muy contentos por el aprendizaje y el conocimiento que obtuvimos en estos días de visita a los campos de la región. Las condiciones de trabajo actuales para los ganaderos argentinos son muy difíciles, y a pesar de eso están con buenos niveles de producción, siguen invirtiendo en genética y eso es bueno». Destacó la calidad de la hacienda que pudieron ver tanto en las recorridas a campo como en las pistas de juras. «Impresionante el trabajo que hacen actualmente acá. Hemos trabajado con muchos toros argentinos, y ahora nos llevamos también catálogo de algunos toros nuevos para considerarlos en nuestros programas genéticos», comentó Ordoñez. «Nos quedamos impresionados por cómo está respaldado todo el proceso genético de Brangus Argentina, con trabajos de investigación; eso es muy importante», efatizó.
Entre otros, sumó sus apreciaciones Rafael Dutari, de la Asociación Brangus de Panamá: «Quedamos bastante impresionados con una cabaña que mezcla el medio ambiente, el clima árido, buena pastura en algunas partes y mucha agua. Esa cabaña en particular nos fue de agrado porque es un ambiente muy similar al nuestro. Lo que vimos acá fue una cosa fenomenal», dijo el criador panameño.
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