La comunidad católica se prepara con fervor y devoción para celebrar la festividad de San Juan Bautista este sábado 25, tanto en la ciudad de Corrientes como en Ituzaingó. El fuego cobra especial protagonismo en esta celebración tradicional, por lo que te contamos su significado.
Este año se anunció la suspensión del Tatá Yehasá o paso por las brasas, en las festividades de Capital, sin embargo en la ciudad de la energía se realizó anoche ante la masiva asistencia de público. Esa es quizás la costumbre más conocida, ¿pero sabés cuáles son las otras?.
TATÁ YEHASÁ
Cuenta la leyenda del Santo, que quien camina sobre las brasas ardientes (Tatá Yehasá en Guaraní), con la fe suficiente no sufre daño alguno.
Es una de las costumbres más arraigadas por la feligresía, que perduró durante siglos y en donde muchas veces desafiaba hasta a cuestiones climáticas.
QUEMA DEL MUÑECO
La quema del muñeco significa pasar por el fuego purificador todos aquellos defectos que los alejan de Dios y de la felicidad. Lo utilizan para alejar la malaria, las pestes y las enfermedades y acercar todo lo bueno.
En Paraguay lo llaman Judas kái o «quema de Judas», que representa a Judas Iscariote, quien traicionó a Jesucristo.
TORO CANDIL
Una costumbre popular que los niños y jóvenes utilizan para jugar en el medio de la fiesta, que parodia a las corridas de toros.
Con varas de madera se hace el cuerpo del toro revestido de lona. En las astas se ata un mechón de estopa o de trapo empapado en algún combustible al que se le prende fuego. El «toro» persigue a la gente, que trata de torearlo.
PELOTA TATÁ
Otro de los juegos tradicionales de la fiesta es la pelota tatá o pelota de fuego.
Se trata de una pelota de trapo bien empapada con gasolina que se le prende fuego y se lanza entre la concurrencia, que para evitarla, le da puntapiés y la aleja hacia cualquier parte
VERANILLO DE SAN JUAN
Es un fenómeno meteorológico que se caracteriza por la aparición de un frente cálido y húmedo poco usual en el período de transición entre el otoño y el invierno
Se debe su nombre a que se presenta frecuentemente entre los días previos o posteriores al Día de San Juan Bautista.