Por suerte todo salió bien y no hubo que lamentar heridos. Y esta explicación tiene que ver, porque cuando transcurría el segundo tiempo se vio bajar de la tribuna de cemento a muchos simpatizantes de Mandiyú. Que buscaban ver el resto del partido ante Boca Unidos desde un lugar un poco más cómodo. Esa fue la primera impresión para los periodistas que estaban en la tribuna principal y bastante alejado del sector que ocupaban los hinchas de Mandiyú. No pasó mucho tiempo y comenzaron a viralizarse imágenes del deterioro de uno de los escalones de la tribuna de cemento. Cedió parte de la mampostería a raíz de los constante saltos de los simpatizantes «albos».
Algo que no estaba en los cálculos de nadie y que deja al descubierto que la inspección del Coprosede correntino no fue tan exhausto como debiera ser.
En concreto, la cantidad de espectadores en el lugar que ocupó la parcialidad de Mandiyú fue mucho más de lo permitido.
Algo que también se pudo observar en el lugar donde se ubicó la parcialidad de Boca Unidos y público en general. Colmada en toda su capacidad.
Un llamado de atención. Seguramente ese sector quedará inhabilitado, al menos donde se produjeron las resquebraduras en lo alto de la plataforma de cemento.
Se dijo en la semana, no era el escenario para un partido de tanta convocatoria.
.