Las localidades del interior de Corrientes concentraron en las últimas horas el mayor impacto del temporal que azotó a la provincia, caracterizado por una intensa caída de agua en cortos períodos de tiempo.
Desde la madrugada del domingo, equipos del Comando Operativo de Emergencia del Gobierno provincial se desplegaron en distintos puntos del territorio, con especial atención en aquellos municipios donde las precipitaciones provocaron anegamientos, complicaciones en la circulación y riesgos para la población.
La situación obligó a activar protocolos de contingencia ante la magnitud del fenómeno meteorológico.
Entre los municipios más afectados se encuentran Empedrado, El Sombrero y Derqui, localidades que registraron acumulaciones significativas de agua y que motivaron la intervención directa de los organismos provinciales. Así lo confirmó el coordinador del COE, Bruno Lovinson, quien señaló que estos distritos forman parte del grupo de municipios en emergencia. “Estamos monitoreando los municipios en emergencia: Empedrado, El Sombrero, Derqui y algunos barrios complicados en la Capital”, aseguró el funcionario al ser consultado alrededor de las 8.30, mientras se dirigía a las zonas afectadas.
El operativo en el interior se desarrolla de manera articulada entre los ministerios del Gobierno provincial, Defensa Civil, la Policía de Corrientes, otras fuerzas de seguridad y los municipios.
El objetivo central es asistir a las comunidades afectadas, evaluar daños, garantizar la seguridad de los vecinos y prevenir situaciones de mayor riesgo ante la persistencia de condiciones climáticas adversas. La coordinación interinstitucional resulta clave para dar respuesta rápida en localidades con infraestructura limitada frente a eventos de estas características.
INTERVENCIÓN PROVINCIAL Y SITUACIÓN EN CAPITAL
El temporal también generó complicaciones en la ciudad de Corrientes, donde se registraron 70 milímetros de lluvia en pocas horas.
Este volumen de precipitaciones obligó a intensificar las tareas de drenaje, monitoreo de zonas vulnerables y asistencia en sectores anegados. Las autoridades provinciales mantienen un seguimiento permanente de la situación, dado que la Capital concentra una alta densidad poblacional y una infraestructura urbana sensible a lluvias intensas.
El COE informó que los trabajos en la Capital se desarrollan en paralelo a los operativos del interior, con el fin de garantizar una respuesta integral en todo el territorio provincial. En este marco, los equipos técnicos evalúan el impacto del agua acumulada, el funcionamiento de desagües y la necesidad de reforzar la presencia en barrios afectados.
Desde el Gobierno de Corrientes señalaron que el monitoreo continuará durante las próximas horas, mientras se mantienen activos los dispositivos de emergencia. La prioridad está centrada en resguardar la integridad de las personas, minimizar daños materiales y restablecer las condiciones normales en las localidades afectadas.

