El ministro de Justicia, López Desimoni, ratificado hoy en el gabinete provincial adelantó que priorizará la atención a víctimas de violencia de género, la protección de niños y adolescentes y la puesta en marcha de la ley de narcomenudeo, mediante un esquema de trabajo articulado entre ministerios y organismos judiciales.
La ratificación de Juan José López Desimoni como ministro de Justicia se produjo en el marco de la conformación del gabinete que acompañará la nueva administración del gobernador Juan Pablo Valdés.
El funcionario destacó que uno de los pilares fundamentales del gobierno provincial es la confianza, subrayando que “lo importante es que mantenga la confianza en su gobierno, que mantenga la confianza en este equipo que hoy va a liderar Juan Pablo Valdés”.
En este sentido, sostuvo que la continuidad de su gestión representa una oportunidad para profundizar el vínculo entre ciudadanía e instituciones, especialmente tras la etapa anterior encabezada por Gustavo Valdés, a la que calificó como “un gobierno exitoso”.
López Desimoni remarcó que la alianza entre ciudadanía y Estado fue determinante para sostener una administración eficiente y comprometida con los problemas cotidianos.
El ministro, remarcó que esa sinergia debe preservarse y fortalecerse, ya que constituye un activo institucional clave para avanzar en políticas públicas de mediano y largo plazo.
Según afirmó, la gestión que culminó dejó bases sólidas para continuar desarrollando políticas de justicia y asistencia integral desde el Estado y consideró que el desafío actual es “profundizar incluso si es posible” los procesos que demostraron eficacia en la relación entre las instituciones y la comunidad.
El ministro también reconoció que la nueva etapa requiere atención renovada sobre áreas complejas y sensibles. Planteó la necesidad de sostener un ritmo de trabajo constante y coordinado dentro del gabinete, afirmando que existe la voluntad política de cumplir con los compromisos asumidos y de responder a las demandas emergentes.
ÁREAS PRIORITARIAS Y DESAFÍOS ESTRUCTURALES

López Desimoni enfatizó que en adelante profundizará la atención integral a víctimas de violencia de género, un ámbito al que definió como delicado y estratégico.
Señaló que se trata de un sector en el que “se trabaja mucho y se resuelven problemas gravísimos” y agregó que “quizás haya que difundir un poco más lo que se hace allí”.
El ministro también destacó la importancia del área de niñez y adolescencia, describiéndola como un espacio “muy sensible, muy complejo”. Enfatizó que la prioridad es garantizar derechos plenos, tal como establecen las leyes, y al mismo tiempo brindar “el calor y el cuidado que allí se le brinda”.
El ministro subrayó que la política pública debe combinar función técnica e implicancia humana, abordando las problemáticas de infancia mediante dispositivos de protección, seguimiento y contención. Planteó que el fortalecimiento de estas áreas es indispensable para mejorar las condiciones de vida de niños y adolescentes en contextos de vulnerabilidad.
Otra de las temáticas esenciales para su gestión es la instrumentación de la ley de lucha contra el narcomenudeo, recientemente reglamentada.
López Desimoni explicó que esta tarea exige coordinación entre múltiples actores, indicando que ahora les corresponde, junto a otros ministerios, “llevar adelante esta tarea en conjunto por supuesto con el Poder Judicial, con el Ministerio Público incluso con la justicia federal”.
TRABAJO INTERMINISTERIAL
López Desimoni también destacó que el trabajo conjunto entre organismos estatales es una práctica consolidada que deberá profundizarse en la nueva gestión. Al ser consultado sobre la cooperación entre ministerios, respondió: “Sí, por supuesto. Eso creo que tiene que ser una impronta que ya la venimos desarrollando”.
El ministro sostuvo que la continuidad en su cargo permitirá fortalecer procesos ya en marcha, como la mejora de los sistemas de asistencia, la coordinación con instituciones judiciales y el fortalecimiento de la red de equipos técnicos.
Indicó que las problemáticas vinculadas a violencia, protección infantil y adicciones requieren presencia estatal constante, capacidad de respuesta y una visión centrada en los derechos de las personas.
En este marco, la tarea del Ministerio de Justicia es articular recursos institucionales que permitan sostener intervenciones efectivas y de largo plazo.
Finalmente, López Desimoni definió su ratificación como una oportunidad para consolidar una política de justicia que combine estabilidad institucional y modernización operativa. Señaló que el desafío central es sostener una gestión cercana a la ciudadanía, reforzar mecanismos de protección y garantizar la coordinación entre áreas claves.
Aseguró que la cooperación entre ministerios, organismos judiciales y fuerzas de seguridad será un componente central de su mandato, destinado a mejorar la capacidad del Estado para prevenir conflictos, atender situaciones de vulnerabilidad y fortalecer el acceso a derechos.

