Un allanamiento por una causa de “supuestas amenazas agravadas” dio un giro inesperado y millonario en la zona sur de Curuzú Cuatiá. Efectivos de la Comisaría Tercera, mientras realizaban una diligencia judicial en una vivienda de la calle Monteagudo, no solo secuestraron elementos relacionados con la amenaza, sino que desenterraron una suma impactante de dinero en efectivo de presunta dudosa procedencia.
La orden de allanamiento se ejecutó este miércoles, en el marco de una investigación por amenazas. Al ingresar a la propiedad, la policía de la Tercera incautó rápidamente varios elementos de interés para la causa, incluyendo un machete, una remera tipo musculosa y una motocicleta Zanella de 150cc, que guardarían relación con el hecho.


Sin embargo, el procedimiento tomó otro matiz cuando en el patio posterior se localizó una pequeña bolsa conteniendo una sustancia blanquecina compactada – una «bochita» – que, se presume, podría tratarse de estupefaciente: más precisamente cocaína.
El tesoro escondido: la mochila del dinero
Al mismo tiempo los uniformados tomaron conocimiento de un movimiento sospechoso minutos antes de su ingreso. Según indicaron a Enfoque Digital, los ocupantes de la casa habrían arrojado una mochila por encima del muro perimetral, hacia el fondo de una propiedad lindante en la calle Berutti.
Ante esta situación, y con la presencia de los habitantes del terreno vecino, los policías procedieron a verificar la mochila. Lo que encontraron sorprendió a todos: varios fajos de billetes de distintos valores.



El conteo, realizado en presencia de testigos, arrojó una elevada cifra: cuatro millones cuatrocientos ochenta y siete mil veinte pesos ($4.487.020).
La procedencia de esta importante suma de dinero es, por el momento, un misterio y es materia de investigación para determinar si tiene relación con algún tipo de ilícito.
Intervención Judicial
Ante la magnitud del hallazgo, los efectivos policiales dieron inmediato aviso a la fiscal Clara Belén Arrúa, quien se hizo presente en el lugar para impartir las directivas correspondientes. Todo lo secuestrado —el machete, la musculosa, la moto, la presunta droga y, por supuesto, la millonaria suma de dinero— fue remitido a la Fiscalía para continuar con los trámites de rigor.


La investigación ahora tiene dos aristas: por un lado, la causa original por amenazas agravadas, y por otro, la compleja tarea de determinar el origen del dinero en efectivo y su posible conexión con actividades delictivas.

