El Presidente de los Estados Unidos recibió a su par argentino en la Casa Blanca y lanzó fuertes elogios hacia la gestión libertaria.
Con la mira puesta en lo que será el escenario que surgirá después del domingo 26, advirtió que su apoyo no será el mismo si en dos años llegara a ganar «un socialista o un comunista». «No seremos generosos», aseveró.
Si bien, gran parte de la prensa opositora intentó relacionar estos dichos con las elecciones venideras, la mirada del primer mandatario estadounidense está puesta hacia dentro de dos años. Lo que sí dejó en claro es que necesita que la gestión libertaria comience a maniobrar por la senda del diálogo y los acuerdos para poder avanzar en forma concreta con las reformas necesarias.
Crear un escenario que brinde seguridad a los inversores extranjeros y locales es la clave para sostener el modelo ideado por el líder de La Libertad Avanza.

