Dirigentes radicales consultados por EL LIBERTADOR, indicaron que la Unión Cívica Radical Distrito Corrientes seguirá el domingo 19 a rajatabla el mandato del Comité Nacional, que el martes 31 de octubre decidió ratificar lo anticipado una semana antes con el documento «La UCR no acompañará a ninguno de los dos candidatos».
Puntualmente, el distrito Corrientes no acompañará con su sello a ninguna fuerza política en competencia por la presidencia de la Nación, ni volcará apoyo de material simbólico o estructura electoral hacia ninguna de las fórmulas por las que los argentinos han sido convocados a votar en esa fecha.
En concreto, no habrá expresión orgánica o partidaria local que defina lo que ya ha definido el Comité Nacional de la Unión Cívica Radical, que sólo habilitó a sus dirigentes, afiliados y militantes, a expresarse en carácter pura y exclusivamente individual en favor de la fórmula Massa-Rossi o Milei-Villarruel.
El distrito local, se señaló a EL LIBERTADOR, tampoco reclamará a sus bases fiscalizar votos o participar de actividades vinculadas a la campaña presidencial, que concluirá en aproximadamente una quincena.
«Esta es una oportunidad para que nosotros, los radicales, marchemos hacia la construcción de un nuevo radicalismo, con la mirada puesta en 2028, con una fórmula íntegra, de radicales, que decante todo lo que ha pasado, y renueve las bases», se señaló.
Una coctelera «recargada»
El silencio que define desde el 22 de octubre a la conducción local de la UCR, en las bases fue reemplazado por una lectura del escenario político vertida por el ex gobernador y presidente de la Unión Cívica Radical Corrientes, Ricardo Colombi, en octubre de 2022: «La oposición es una coctelera».
Así había definido el titular del radicalismo correntino y senador provincial a sus propios aliados, ante la ausencia de respuestas del frente opositor a los abruptos cambios que desde la economía nacional decantaban sobre las provincias del Norte Grande. El ex mandatario había reclamado a sus congéneres actuar dentro de «sus cabales» y actuar con «seriedad» para enfrentar al crecimiento evidente del «fenómeno Milei».
«La «coctelera» de Juntos por el Cambio tiene que parar. Tiene que haber mesura, juntarse y dejar de hablar pavadas, estupideces, creyendo que uno por decir ciertas cosas es más que el otro», había dicho el ex gobernador para manifestar su desilusión ante la persistencia de acusaciones cruzadas en el seno de la coalición opositora pese a la proximidad de la apertura del tiempo de campaña, expresión que aún resuena en los pasillos de la UCR.
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