El propietario de una maderera ubicada en la intersección de avenida Iberá y Sarmiento, perdió su negocio tras un voraz incendio a mediados de febrero y presumía que fue intencional. Este sábado, una furgoneta de su propiedad amaneció carbonizada por el fuego.
Un vehículo tipo Combi que había sido alcanzado por el fuego en ese episodio fue retirado del lugar y quedó estacionado en la calle. Ahora, a 20 días del siniestro, el vehículo fue prendido fuego y quedó completamente inutilizado.
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